Según ha informado el centro en un comunicado, los pacientes que deseen hacerse una revisión gratuita de sus lunares pueden solicitar ya su cita previa en la web www.aedv.es/euromelanoma.

En España se registran alrededor de 3.600 nuevos casos anuales, de los que un 14 por ciento corresponde a la Comunitat Valenciana.

Su presencia en el país es alta respecto a la tasa mundial, con un ascenso muy importante, especialmente desde los años 90. La doctora Gabriela Arana, especialista de la Unidad de Dermatología del centro, ha destacado que "la incidencia del melanoma está aumentando de forma alarmante, con un 7 pot ciento más de casos diagnosticados cada año, principalmente entre los jóvenes de 25 a 29 años".

Según la especialista, este incremento tiene su origen en los hábitos de exposición solar y de bronceado, la migración de poblaciones de piel clara a entornos soleados como el español, el aumento de los deportes acuáticos o al aire libre, además de factores ambientales, como el cambio climático y el deterioro atmosférico por la contaminación.

La sintomatología que presenta este tipo de cáncer suele ser la de una lesión pigmentada en la piel que experimenta un cambio en el tamaño, forma o color. Su localización más frecuente suele diferir según el sexo. Así, es más habitual en la parte del tronco en hombres y en las extremidades inferiores en mujeres.

Para detectarlo, el doctor José Mª Martín, dermatólogo del Hospital Quirónsalud

Valencia, aconseja seguir las reglas del ABCDE, siglas que hacen referencia a la asimetría de este tipo de lesiones, "bordes irregulares, color heterogéneo y diámetro superior a seis milímetros".

"Sin embargo, estos hallazgos no se cumplen en todos los melanomas, de ahí que el más importante sea la E, su evolución: cualquier cambio en un lunar debe ser valorado por un dermatólogo", ha apuntado.

ALERTA SEGÚN TIPO DE PIEL

El centro ha alertado de que las personas de piel clara, pecosa, rubia y, sobre todo, las pelirrojas "son especialmente sensibles a padecer un melanoma, además de quienes cuentan con un alto número de lunares, especialmente si sufrieron quemaduras solares en la infancia".

Otro grupo que debe cuidarse y controlarse es el de los individuos con alteración de la inmunidad, ya sea por enfermedades o por fármacos. "Pero, quizás, unos de los sectores más sensibles de la población sea aquel que ya ha tenido un melanoma, porque tiene una probabilidad superior de padecer un segundo, así como los familiares directos de dichos pacientes, que deben seguir un control estricto por un dermatólogo", ha especificado la doctora Arana.

Los especialistas aconsejan evitar las exposiciones solares en horarios de máxima radiación, especialmente en el caso de los niños, las personas de piel muy clara o quienes tengan factores que predisponen para tener un melanoma. Por eso, se aconseja usar siempre protector solar y repetir su uso cada tres horas, y más seguido si vamos a meternos al agua o sudar profusamente, así como vestirse con ropa adecuada, gorro o sombrero y utilizar gafas de sol correctamente homologadas.