La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha presentado este martes el proyecto 'Madrid Puerta Norte', que sustituye a la última versión de la 'Operación Chamartín' y reduce de 17.000 a 4.600 el número de viviendas previstas, de las que 1.000 serían protegidas.

El documento presentado por el Ayuntamiento considera que la ordenación de suelos de la Calle 30, del nudo de Fuencarral y de las infraestructuras ferroviarias de su entorno "afectan al conjunto de la ciudad" por lo que es preciso que su iniciativa, ejecución y financiación sea asumida directamente por la Administración.

Según ha informado el Ayuntamiento, este nuevo plan supone una estrategia global de intervención con un "mayor peso de la gestión pública" para que las plusvalías generadas por la operación "reviertan en beneficio de la ciudad". Para ello, plantea la creación de un consorcio urbanístico público para desarrollar la zona situada al sur de la Calle 30, que incluye la creación de un gran Centro de Actividad Económica y de Negocios.

El nuevo proyecto del Ayuntamiento mantiene la densidad edificatoria -1,05 m² edificables por cada metro cuadrado de suelo-, pero reduce a 1,7 millones los metros cuadrados sobre los que se puede construir.

La alcaldesa ha presentado el plan en el auditorio del Palacio de Cibeles, en un acto al que no han asistido los promotores de la operación Chamartín. Carmena ha remarcado que la propuesta para el norte de Madrid "no está acabada" y que está abierta a "sugerencias"

Según estima el consistorio, este nuevo plan propiciará la creación de unos 128.000 puestos de trabajo, una cifra ligeramente superior a los 120.000 previstos por Distrito Castellana Norte (DCN), empresa promotora de la anterior versión de la Operación Chamartín. De esos empleos, 55.000 corresponderán al uso comercial, 17.000 al industrial y 56.000 a la construcción residencial.

El Ayuntamiento considera que al reducir de manera sensible la edificabilidad asignada al ámbito de ordención, se podrá reducir de manera proporcional la presión sobre las grandes infraestrucutras viarias, minimizando así el impacto ambiental y paisajístico sobre las zonas próximas.

Una vez presentada la propuesta del Ayuntamiento, el ejecutivo municipal convocará al Ministerio de Fomento, a la Comunidad de Madrid y a DCN -titular de los derechos de gestión- para concretar una propuesta definitiva en base al documento presentado. Manuela Carmena ha explicado que el proyecto aún no ha sido presentado a DCN porque "lo lógico es presentarlo primero a Madrid, a la ciudad" y ha recordado que el 82% del suelo involucrado por en la operación es público.

Por su parte, José Manuel Calvo ha explicado que el plan del Ayuntamiento incluye la necesidad de acometer en 2017, la mejora del Nudo Norte y la "inaplazable" nueva estación de Chamartín, en 2018. Ambas infraestructuras, según ha explicado, podrían tener coste cero para el ciudadano al financiarse con las plusvalías del desarrollo.

La propuesta integral del Ayuntamiento consta de dos ambitos de actuacion diferenciados que toman la Calle 30 como eje divisorio. Al sur de la misma tendrá lugar una operación de ampliación y mejora de las estación de Chamartín y la creación de un Centro de Actividad y Negocios que conectará el proyecto con las cuatro torres de la Ciudad Deportiva.

En esa zona se plantea una actuación de iniciativa y gestión pública. Los planes para este ámbito incluyen cubrir parcialmente las vías de ferrocarril, integrar los espacios residenciales de los bordes urbanos y levantar dos edifiaciones de 40 plantas de altura y otros dos de 20.

El resto de edificaciones se adaptarán al entorno no superando las 16 plantas en la zona de la calle Bambú y las 12 en las calles Mauricio Legendre y Agustín de Fozá. Las 1.000 viviendas públicas proyectadas por el consistorio serían levantadas en esta zona, que también acogerá 408.139 metros cuadrados de oficinas y 274.251 de reservas de suelo verde.

Al norte de la Calle 30, el Ayuntamiento plantea una intervención mayoritariamente privada para el desarrollo de unas 3.600 viviendas y un total de 720.177 metros cuadrados destinados a actividades productivas de uso terciario. En este área, las alturas de edificación se adecuarán a las existentes del entorno, que oscilan entre cinco y siete plantas.

Sin embargo, cerca de la estación de cercanías de Fuencarral se plantean cuatro torres de uso terciario con un máximo de 40 plantas y otras cuatro torres destinadas a uso residencial de 20 plantas. La limitación de altura de los pisos anunciada por el Ayuntamiento trunca los planes de DCN de edificar la torre más alta de Europa.

El plan incluye también construir una nueva estación de metro en el distrito de Fuencarral entre las estaciones de Las Tablas y Montecarmelo y  abrir nuevas líneas de la EMT.

El Gobierno de Cristina Cifuentes ha reaccionado a la propuesta de Carmena anunciando su temor a que el gasto público en la Operación Chamartín sea más alto con el nuevo proyecto. Además, la Comunidad se queja de no haber sido informada previamente del plan pese a que debe participar en él la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio.

"Para una modificación de esta naturaleza hubiera sido conveniente contar con la Comunidad, por lo menos en dar información. Echamos de menos que se nos haya informado convenientemente", ha asegurado Ángel Garrido, el portavoz del Ejecutivo y consejero de Presidencia y Justicia.

Por su parte, la portavoz socialista de Desarrollo Urbano Sostenible en el Ayuntamiento de Madrid, Mercedes González, ha asegurado  que el PSOE está "contento" con el proyecto municipal Madrid Puerta Norte. "Es una nueva propuesta que nos han dejado encima de la mesa sobre un nuevo desarrollo con el que nosotros estamos satisfechos. Luego vamos a caminar y esperamos que caminemos todos juntos", ha explicado.