Un hombre ha sido detenido en la madrugada de este martes tras apuñalar a al menos cuatro personas en una estación de tren de Múnich, al grito de "Alá es grande", según afirmaron varios testigos. Una de las víctimas ha fallecido.

El ataque se ha producido en la estación de Grafing, que ha sido cerrada temporalmente, y el autor ha sido detenido poco después. La Fiscalía Estatal de Múnich ha señalado que el arrestado es un alemán de 27 años que no reside en el estado de Baviera, en el que se encuentra Grafing.

Las cuatro víctimas del ataque son todos varones. Un hombre de 50 años resultó herido grave y falleció después en el hospital. Los otros tres heridos, de 58, 43 y 55 años, se encuentran ingresados en distintos centros hospitalarios de la región.

"El atacante realizó declaraciones en el lugar de los hechos que llevan a deducir una motivación política", ha añadido la Fiscalía, sin ofrecer más detalles.

El ministro de Interior de Baviera, Joachim Herrmann, ha informado después de que, según las primeras investigaciones, no hay indicios de que se trate de un ataque islamista.

En declaraciones a los medios tras una reunión del Gobierno bávaro en Múnich, Herrmann ha explicado que presumiblemente el agresor tiene problemas psiquiátricos y de drogadicción.