El controlador del tráfico ferroviario acusado de homicidio involuntario por la muerte de once personas en un choque de trenes hace dos meses en Alemania fue enviado este martes a prisión, tras señalar la Fiscalía que poco antes de la tragedia estaba distraído jugando en su teléfono móvil.

Según medios alemanes, los investigadores indicaron que, "ante la proximidad temporal" entre el siniestro y el uso de juegos en internet, "se parte de la base de que con ello (con el juego) el acusado estaba distraído del control del tráfico ferroviario".

Conforme a estas nuevas revelaciones sobre el accidente en Bad Aibling (Baviera, sur de Alemania), la Audiencia Provincial de Rosenheim, a petición de la Fiscalía, ha dictado prisión preventiva para el controlador, que está acusado de homicidio involuntario y lesiones involuntarias.

En el accidente, la mayor catástrofe ferroviaria en una década en el país, murieron 11 personas y 85 resultaron heridas, varias de ellas de gravedad.

De acuerdo con la investigación realizada hasta el momento, el hombre envió señales erróneas a los dos trenes, que chocaron frontalmente, y después, al intentar avisarlos a través del sistema de emergencia radiofónico, también se equivocó en la clave que debía marcar