Unos padres recurren la sentencia que les obliga a tratar con quimioterapia a su hijo

  • Un juez obliga a los padres a tratar a su hijo de 6 años con quimio y radioterapia.
  • Los padres defienden que quieren seguir tratamientos alternativos.
  • "Los efectos son demasiado duros, demasiado perjudiciales", han declarado.
Acelerador lineal para el tratamiento contra el cáncer con radioterapia.
Acelerador lineal para el tratamiento contra el cáncer con radioterapia.
ARCHIVO
Acelerador lineal para el tratamiento contra el cáncer con radioterapia.

Unos padres australianos están dando la batalla judicial para evitar que su hijo de seis años reciba tratamiento de quimioterapia por un tumor cerebral maligno.

Angela Kiszko y Adrian Strachan defienden que quieren seguir tratamientos alternativos en lugar de la quimioterapia y radioterapia prescrita por los médicos, después de la cirugía a la que sí se ha sometido el menor.

"No queremos que el cerebro de mi hijo quede frito con la radiación. Los efectos son demasiado duros, demasiado perjudiciales. Nos resulta incluso difícil llamarlo tratamiento", expuso la madre a los medios australianos.

Los padres han aparecido en la televisión para exponer su caso después de que un doctor consiguiera que un juez obligara a los padres a llevar al niño, Oshin Kiszko, a ser tratado del cáncer en el hospital. El juez tomó la decisión en base a la evidencia médica y al interés superior del menor, según la Asociación Médica Australiana.

El pasado mes de marzo, la justicia australiana decretó que el "poder de los padres no era ilimitado" y aseguró que los padres no estaban actuando en el mejor interés de su hijo porque los médicos creían que, sin tratamiento, iba a morir en unos meses.

Los médicos informaron al juzgado de que Oshin tenía una posibilidad del 30% de sobrevivir cinco años si la quimioterapia se iniciaba inmediatamente y una probabilidad del 50% si recibía quimioterapia y la radioterapia. Sin embargo, podría morir en cuestión de meses si no recibía tratamiento alguno.

Los padres están apelando la decisión judicial. La madre explicó a los medios australianos que su primera semana de quimioterapia "fue horrible" y que, aunque le pudiera salvar, prefiere la calidad de vida por sobre la cantidad.  "Quiero que él viva. No quiero que sobreviva ", añadió.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento