La Consejería de Sanidad de Cantabria y Cruz Roja colaboran en la asistencia sanitaria de los campos de refugiados de Ritsona y Pireo (Grecia) con dos médicos, cifra que podría ampliarse hasta cinco profesionales.

Para ello, el Servicio Cántabro de Salud (SCS) ha comunicado a sus profesionales la urgente necesidad de asistencia sanitaria que demandan estos campos de refugiados y la urgente solicitud de contar con dos médicos para iniciar una misión humanitaria en el plazo más breve de tiempo, informa el SCS.

El objetivo es facilitar cuidados preventivos y curativos de salud, que incluyen atención primaria, salud materno infantil, promoción de higiene, seguimiento epidemiológico y vacunación si así lo solicitase el Ministerio de Salud de Grecia.

La actividad asistencial también puede incluir procedimientos quirúrgicos menores, aunque no cirugía mayor que requiera anestesia y hospitalización. De hecho, está previsto que las unidades coordinarán la derivación a hospitales griegos para aquellos cuidados que requieran ingreso hospitalario.

A través de la intranet corporativa del SCS se ha informado del perfil profesional que se solicita y que incluye a médicos internistas, de familia, de urgencias y pediatras.

Entre otros requisitos, es imprescindible hablar inglés o francés y tener disposición para salir de manera inmediata durante un mes.

A nivel económico, Cruz Roja Española cubre los gastos derivados del seguro médico, billete de avión hasta Madrid y desde allí hasta el lugar de destino en Grecia, y el alojamiento.

Antes de partir hacia el país heleno, los profesionales interesados realizarían una sesión de introducción de la misión en Madrid y se integrarían en un equipo multidisciplinar de la Cruz Roja Española y la Cruz Roja Francesa, trabajando en apoyo y de forma coordinada con la Cruz Roja Griega.

Labor asistencial

En cuanto a la actividad asistencial a desarrollar, los problemas de salud están relacionados fundamentalmente con las condiciones en las que migrantes y refugiados se enfrentan en su viaje (gripe, enfermedades de la piel, heridas, reacciones alérgicas, dolores musculares) y otros problemas de salud agudos que han aumentado como consecuencia del invierno y por las condiciones de vida, fundamentalmente derivadas de la falta de condiciones adecuadas de alojamiento.

Dada la prevalencia de enfermedades no trasmisibles en los países de origen, se prestará especial atención a enfermedades crónicas (como diabetes o hipertensión) ya que en muchos casos los migrantes y refugiados no han podido seguir el tratamiento durante su viaje. Además, estas personas presentan elevados niveles de estrés y ansiedad.

Por su parte, las mujeres y los niños constituyen un grupo "especialmente vulnerable" tanto por los viajes inseguros como por las experiencias previas en los países de origen.

A través de la información facilitada por el SCS en su intranet también se explica que todos los profesionales interesados que no pudieran colaborar inmediatamente con esta misión podrían ser entrevistados para su incorporación en una bolsa de voluntarios de cara a futuras rotaciones por si fuera necesario.