Cuando somos niños, todos tenemos una profesión ideal en la que desearíamos trabajar de mayores. Médico, enfermera, futbolista, piloto, bombero... son algunas de las opciones más deseadas por niños y niñas.

Para comprobar si estas preferencias se corresponden también con las de los niños discapacitados, la Fundación Adecco ha realizado por tercer año consecutivo su encuesta

¿Qué quieres ser de mayor?

Entre más de 1.500 niños de toda España. Los resultados permiten conocer cuáles son las aspiraciones profesionales de estos chavales.

SUEÑOS LABORALES

¿Qué buscan?

Al contrario que el resto de niños, los que sufren algún tipo de discapacidad no tienen una profesión ideal definida. Dadas las características de este colectivo, su aspiración principal es tener un trabajo digno en el que poder realizarse profesionalmente.

¿Cómo se comportan?

En la práctica, el colectivo de discapacitados es más fiel a la empresa que el resto de trabajadores. Así lo demuestran ya desde niños (más del 50% desearía estar siempre en la misma empresa).

Áreas preferidas

Por sexos, los empleos preferidos por los chicos son los de ciencias (18%), atención al cliente (16%) y las letras (8%). Ellas prefieren la atención al cliente (28%), la enseñanza (14%) y la sanidad (10%).

Lo que idealizan

Los trabajos que más les gustan,  aunque muchas veces estén fuera de su alcance, son los de futbolista (16,5%), profesor (5,6%) o policía (4,5%). Las niñas preferirían ser actrices (11%), cooperantes (8%) y empresarias (8%).

Jefa o jefe

Respecto al sexo de su futuro jefe, los niños discapacitados de 4 a 16 años prefieren que sea una mujer. Sin embargo, al 71% de los que tienen entre 11 y 16 años les resulta indiferente.

Niños con los pies en el suelo

Resulta curioso comprobar la madurez que demuestran los niños con discapacidad a la hora de buscar un empleo.  Las opciones laborales que destacan entre sus favoritas son aquellas en las que no es necesaria una alta cualificación. Para ellos lo más importante es tener la oportunidad de acceder a un empleo, sea del tipo que sea. Además, prefieren conseguir un trabajo en el que puedan disponer de tiempo suficiente para estar con su familia. La independencia no es una de las prioridades de los niños con discapacidad, por lo que anteponen la posibilidad de pasar más tiempo con sus familias antes que ganar mucho dinero. De hecho, el 82% de los entrevistados prefiere a la familia frente al dinero.