Dos citas esperan esta semana a la exalcaldesa de Valencia, Rita Barberá, el Pleno del Senado convocado para el martes y el miércoles y su comparecencia ante el PP por el expediente informativo que se le ha abierto tanto a ella como a los investigados en Valencia por presunto blanqueo de capitales.

Esta declaración ante el Comité de Derechos y Garantías del partido puede realizarse en persona o por escrito. Por el momento no ha trascendido cuándo ocurrirá, aunque fuentes populares aseguraron que el propósito del partido es resolver el asunto lo más rápido posible.

Los afectados son "las personas físicas investigadas o llamadas a declarar en la pieza separada A de las Diligencias Previas 881/15 del Juzgado de Instrucción número 18 de Valencia, que estén afiliadas al Partido Popular".

El instructor del expediente es el diputado nacional por Albacete, Francisco Molinero Hoyos, que ya se ha encargado de otros casos relevantes que han afectado al PP como el de las tarjetas 'black' de Caja Madrid que imputó a Rodrigo Rato, o el del exdiputado del PP, Pedro Gómez de la Serna.

Las mismas fuentes aseguraron que el objetivo es iniciar esas declaraciones e interrogatorios de los implicados después de las vacaciones de Semana Santa. Está por ver si los afectados comparecen ante el instructor, lo que podría tener lugar en Madrid o en Valencia, o deciden declarar por escrito como ha ocurrido en otros casos.

A todo ello, se suma la declaración que Rita Barberá se comprometió a hacerle al juez que investiga el caso y que la invitó a dar explicaciones voluntariamente. Tampoco en este caso tiene por qué hacerlo en persona.

El que sí está convocado públicamente es el Pleno del Senado, que tendrá lugar los próximos martes y miércoles. En el Grupo Parlamentario Popular no confirman la presencia de Barberá; su secretario general, Javier Arenas, aseguraba el martes que no sabía qué piensa hacer la exalcaldesa y que no había hablado con ella.

Barberá decidió acudir al primer Pleno de la legislatura, el pasado 15 de marzo, y se convirtió en protagonista de la sesión. Entre otras cosas porque buena parte de sus compañeros de filas preferían que para entonces hubiera dimitido.

Varios senadores expresaron su malestar por la presencia de la exalcaldesa y por su actitud, ya que ha pasado a la ofensiva y se revuelve contra los compañeros de partido que están criticando su actitud, han asegurado fuentes 'populares'.

Pero si vuelve esta semana al Senado, Rita Barberá podrá asistir a un debate sobre los aforamientos, tan discutidos de nuevo a propósito precisamente de la presencia de la exalcaldesa en la Cámara.

La propuesta socialista que se votará el martes es concisa: el Senado ve necesaria una reforma urgente de la Constitución para "la supresión del aforamiento" a diputados, senadores y parlamentarios autonómicos. El PSOE argumenta que esta protección para el ejercicio de la política pudo tener sentido cuando se creó, pero no lo tiene hoy y los ciudadanos la perciben como "un privilegio innecesario".

"Especialmente, cuando se asiste a situaciones injustificables de aferramiento al escaño que sólo se explican como último resquicio para evitar una investigación judicial", aseguran los socialistas.

Su portavoz en el Senado, Óscar López, ha explicado que la supresión de los aforamientos forma parte del acuerdo de Gobierno alcanzado entre su partido y Ciudadanos y que el PSOE ha decidido llevar el debate al Senado por la presencia de Rita Barberá. "Será importante conocer la posición de todos los grupos. Veremos el PP", ha dicho.