La vida de Rafael Fuentes y su familia dio un giro radical el 7 de abril de 2015. Ese día de triste recuerdo para él y los suyos falleció Inés, su mujer, a los 46 años producto de un cáncer de pancreas. "Los médicos del Ramón y Cajal le dieron en principio dos semanas de vida y al mes falleció", recuerda emocionado su marido. La desaparición de Inés, además de un vacío irreparable, dejó a Rafael solo a cargo de su dos hijos menores: Isabel, de nueve años, y Rodrigo, de siete. El problema que tenía que afrontar en esos momentos este empleado del Ayuntamiento de Madrid era el de poder conciliar su vida laboral con la familiar.

Rafael trabaja como oficial administrativo en el polideportivo del distrito de Hortaleza en el turno de tarde (de 15.00 a 22.30 h.). Este horario le impide atender a sus hijos, cuyo horario escolar es de 9.00 a 16.00 h. «Mis hijos han perdido a su madre y pueden perder también a su padre», asegura. Por ello, el 21 de abril de 2015 solicitó al Ayuntamiento, entonces gobernado por Ana Botella (PP) un cambio ordinario al turno de mañana. Pero no se lo concedieron.

"Por el método que tienen establecido nunca me van a dar una plaza de mañana porque nunca va a surgir. Se colocan a los solicitantes de una misma categoría y turno solicitado en una lista de espera por antigüedad, en este caso yo estoy el número 2 pero tampoco al número 1 le han cambiado de turno porque plaza que aparece, plaza que amortizan y le cambian el nombre (categoría), como ha sucedido con una oficial administrativa que se jubiló el pasado julio en el polideportivo Triángulo de Oro (Tetuán)", explica este trabajador municipal, que recalca que su situación es "extraordinaria": "No lo pido para hacer yoga o aerobic. Lo solicito por necesidad, porque no tengo a nadie que cuide de mis hijos".

Las esperanzas de Rafael volvieron a nacer con el cambio de Gobierno en el Ayuntamiento: "Todo el mundo opinaba que mi problema seguro que se iba a solucionar con Carmena (Ahora Madrid), que habría más compresión". Sin embargo, la realidad estuvo muy lejos de lo esperado: después de varias reuniones con responsables municipales del distrito de Hortaleza, entre ellos la concejala-presidenta, Yolanda Rodríguez, hubo amago de solución, pero la respuesta volvió a ser negativa.

"Había perdido toda esperanza, pero en febrero me llamó una de las asesoras de Carmena (Lourdes Menéndez) y me dijo que no me preocupase. Que mi problema había que solucionarlo por humanidad. Una semana después volvió a hablar conmigo para decirme que se había equivocado, que tenía que seguir el procedimiento establecido. Me siento engañado. Me ofrecen la vía ordinaria para una situación que requiere una actuación excepcional", relata este vecino de Sanchinarro.

Harto de darse de bruces contra un muro, Rafael presentó el pasado 22 de febrero un escrito que ha sido denegado. "Las solicitudes de cambio de turno cursadas por los trabajadores fijos de la misma categoría se atenderán por riguroso orden de antigüedad en la misma...sin que exista otra circunstancia que modifique el criterio de antigüedad", contestó el Consistorio en una carta con fecha de 4 de marzo firmada por Fuencisla Higuera, subdirectora general de personal laboral.

Ante esta situación, Rafael Fuentes llevará al Ayuntamiento a los tribunales amparándose en el Estatuto de los Trabajadores, el Estatuto del Empleado Públic, la ley de igualdad entre hombre y mujeres y varias sentencias del Tribunal Constitucional, aunque deja claro que aún sigue dispuesto a llegar a un acuerdo: "Estoy abierto a soluciones que pasen por la incorporación a otro puesto de trabajo no correspondiente a mi actual categoría, incluso al traslado a un destino diferente, siempre que no implique una pérdida de poder adquisitivo y sea compatible con el horario escolar de mis hijos para poder atenderles", señala este empleado municipal, que se reincorporará a su puesto de trabajo el 25 de abril después de un año de baja por depresión.

Este diario se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento para conocer de primera mano cuáles son las razones que existen para no atender la petición de Rafael Fuentes, dado que sus circuntancias son extraordinarias. "Hay un procedimiento reglado que se acordó con las centrales sindicales y no podemos saltarnos la legalidad. Si nos dejáramos llevar por las tripas estaríamos siendo injustos con el resto de trabajadores", afirma Yolanda Rodríguez, concejala-presidenta de Hortaleza, que desvela que hay una madre soltera en la misma situación que Rafael que también tendrá que esperar. "Defendemos el cumplimiento de un proceso negociado con los sindicatos", concluye.