Las lluvias generalizadas y la bajada de las temperaturas que acompañan la borrasca han propiciado un tiempo "típico" de otoño en la península, y aunque durante los próximos días los termómetros volverán a subir, la entrada de un nuevo frente frío volverá a partir del miércoles a generar inestabilidad.

Temporal en el País Vasco

La inundación de bajos y garajes, el desbordamiento de regatas y canales, embalses a plena capacidad, y desprendimientos, caída de árboles y balsas en las carreteras, son algunas de las consecuencias en Guipúzcoa del temporal de lluvia que azota estos días el País Vasco .

Un desprendimiento de tierras ha sepultado hoy una extensión de unos 30 metros de un carril bici situado en el Paseo Otxoki de San Sebastián , sin que haya indicios de que se encuentre ninguna persona atrapada.

Las zonas más afectadas del territorio son las comarcas de Oiartzun, Bidasoa y Urumea, cuyas cuencas han tenido además que absorber el desembalse controlado de los pantanos de San Antón y el Añarbe.

El gran caudal del río Bidasoa, que corrió riesgo de desbordamiento, originó la salida de su cauce de las regatas de Ibarla y Jaizubia, lo que afectó a accesos como el del hotel Urdanibia, que pasa bajo la N-I, o el de la autopista A-8. En Hernani, las aguas del río Urumea invadieron la zona del campo de fútbol, o Astigarraga, donde quedaron anegadas multitud de huertas.

Las salidas de bomberos e intervenciones de la Ertzaintza en las carreteras guipuzcoanas fueron numerosas durante todo el día por balsas, objetos en la calzada y desprendimientos de tierras y piedras, lo que originó diversos cortes de tráfico y numerosos accidentes "de chapa", sin consecuencias importantes en ninguno de los casos, precisó el departamento vasco de Interior.

Sin vacaciones en Melilla

El fuerte temporal que se está registrando en la zona del mar de Alborán ha impedido a 1.200 personas y 240 vehículos embarcar en el puerto de Melilla, ante la imposibilidad de que el barco rápido 'Milenium Tres' haya podido realizar sus viajes previstos.

La situación es "complicada", ya que si el tiempo no mejora, mañana habrá entre 2.000 y 2.500 personas y unos 500 vehículos, todas ellas pertenecientes a la Operación Paso del Estrecho (OPE), en el puerto melillense a la espera de poder coger un barco para retornar a sus países de residencia.

Playas vacías en Levante

Las fuertes rachas de viento de Levante han obligado hoy a la mayoría de flotas pesqueras de Valencia y Alicante, principalmente de los puertos de Gandía, Cullera, Sagunto y del sur de Alicante, a quedarse amarradas o a regresar a puerto antes de lo previsto.

La playa de Benidorm está vacía. Los 23 grados han obligado a residentes y turistas a buscar otras alternativas de ocio y a abrigarse.

Se esperan vientos del nordeste que alcanzarán los 70 kilómetros por hora, y chubascos en el litoral de Alicante y Valencia.