La red de Metro de Barcelona ha registrado hasta las 12.00 horas de este miércoles 300.000 validaciones, un 34% menos que un día normal pero un 12% más que el lunes -el primer día de huelga-, ha informado TMB en un comunicado.

La diferencia de este miércoles respecto a un día laboral normal ha sido menor en la hora punta, ya que entre las 7.00 y las 9.00 horas el Metro ha contado con un 28% menos de usuarios.

El servicio de Metro de Barcelona está cumpliendo los servicios mínimos establecidos con motivo de la segunda jornada de huelga que los trabajadores han convocado esta semana.

Así lo ha afirmado Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), que ha apuntado que la jornada de huelga "se está desarrollando sin incidencias".

También ha informado de que "de manera preventiva, desde primera hora se han mantenido cerrados cerca de 20 accesos de estaciones, para facilitar la eventual gestión de los flujos de pasaje en los otros accesos abiertos".

A la hora punta de la mañana los trenes han circulado con intervalos de 5-7 minutos en las líneas convencionales y de 8-9 minutos en las líneas automáticas.

Fuentes sindicales han asegurado que el seguimiento de la huelga está en la misma línea del lunes, cercano al 100%, y han subrayado que el porcentaje de trabajadores que han ido a trabajar ha sido "absolutamente residual".

El Metro de Barcelona opera este miércoles al 65% del servicio en las horas punta y al 45% el resto del día en una jornada para la que la Generalitat ha ampliado los servicios mínimos respecto a la que los trabajadores protagonizaron también el lunes coincidiendo con el primer día del Mobile World Congress (MWC).

La Conselleria de Trabajo ha ampliados así del 50% al 65% los servicios mínimos en horas punta —de las 6.30 a las 9.30 y de las 16.00 a las 20.00 horas— y del 30% al 45% el resto de la jornada, de modo que los trenes podrán circular en intervalos que oscilarán entre los cinco y los siete minutos las horas punta y entre ocho y once el resto del día.

Según ha informado en un comunicado, la Conselleria ha modificado la anterior orden "una vez estudiados los informes de movilidad y seguridad" realizados el lunes, primer día de huelga.

Ha añadido que, además de atender al criterio de seguridad y movilidad, esta ampliación se debe también a que este martes se ha activado el protocolo por la contaminación atmosférica en el área de Barcelona.

La huelga se produce después de que los trabajadores y Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) no hayan alcanzado un acuerdo sobre el convenio colectivo —que abordaron también la noche del lunes al martes en una reunión hasta la madrugada—, y los empleados han protestado durante la mañana para pedir mejoras laborales en una concentración ante el Ayuntamiento.

La L1 del Metro ha sufrido este miércoles a las 8.41 horas una "incidencia técnica" que afecta temporalmente a su frecuencia de paso -ya perjudicada por la huelga-, ha informado Transports Metropolitans de Barcelona (TMB).

Los convoyes se han detenido más tiempo del habitual en cada estación de la línea, que pasa por Plaça Espanya, una de las paradas cercanas al recinto en el que se celebra el Mobile World Congress (MWC).

La L1 ha sufrido una parada técnica a las 8.41 horas para restablecer el sistema de señalización en la zona de Bellvitge y regular los intervalos de la línea, y la L2 se ha detenido unos minutos para facilitar la asistencia médica a un pasajero indispuesto.

Algunos usuarios han criticado a través de Twitter que coincidiera una avería con la huelga.

Cerca de 200 trabajadores de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) se han manifestado este miércoles en la plaza Sant Jaume de Barcelona para exigir mejoras salariales y la contratación indefinida de empleados que actualmente se encuentran en situación temporal.

Los manifestantes han exhibido pancartas en las que se podía leer 'Colau: decepción. Vidal: casta', y han gritado 'No hay pan para tanto chorizo' contra la estructura directiva de TMB, que creen opaca y desproporcionada.

El portavoz del comité de huelga de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), Oscar Sánchez, ha asegurado que el aumento de los servicios mínimos durante la huelga de los trabajadores de Metro decretado por la Generalitat "se trata no de una decisión objetiva y técnica, como se quiere hacer ver, sino de una decisión totalmente política".

"Se lleva a cabo de una manera deliberadamente encaminada a provocar problemas en el cumplimiento de los servicios mínimos", ha declarado a los medios al inicio de la concentración de los huelguistas en la plaza Sant Jaume de Barcelona.

También ha criticado que el Ejecutivo catalán informara antes a los medios de comunicación que a los trabajadores, que se enteraron por la prensa, ha dicho.

Aún así, ha aseverado que los servicios mínimos se están cumpliendo estrictamente y ha dicho que sabía con anterioridad que el Govern podría aumentarlos: "Se nos hizo llegar el comentario de que si no llegábamos a un acuerdo con la empresa, esto podía pasar".

"No veo que el mundo se acabe ni más contaminación que otros días, veo la intención de acabar con los derechos de los trabajadores", ha sentenciado ante más de 200 manifestantes.

Sánchez ha cifrado en "prácticamente al 100%" el seguimiento de la huelga entre los trabajadores de los primeros turnos de la mañana, aunque los datos finales no se sabrán hasta terminar la jornada.

Preguntado por si las movilizaciones, que han coincidido con la celebración del MWC en la ciudad, seguirán en próximas semanas, ha respondido que "hay 100% de seguridad de que las va a haber" porque ni TMB, ni el Ayuntamiento ni la Generalitat han contactado con el comité de huelga desde la última reunión que mantuvieron el lunes, ha dicho.

También ha explicado que este jueves el comité de empresa decidirá qué día convoca una asamblea general con todos los trabajadores (podría ser jueves de la semana que viene, pero no es seguro).

Ha afirmado, asimismo, que no han solicitado al Ayuntamiento que los reciba y el Ayuntamiento tampoco se lo ha propuesto.

Sobre las afectaciones de la huelga al MWC y la posibilidad de que GSMA -la empresa organizadora- se plantee rescindir el contrato que tiene con Barcelona, ha valorado: "El derecho constitucional a la huelga existe. No sé si alguien se plantea que un contrato privado pueda pasar por encima de esto".

El sindicato CGT ha acusado la Generalitat, con el "beneplácito" del Ayuntamiento de Barcelona de "sabotear" la segunda jornada de huelga de metro de esta semana después del incremento de los servicios mínimos decretado por el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias.

En un comunicado, CGT afirma que "la imposición del aumento" de los servicios mínimos, que pasan de un 50% a un 65% a las horas punta y de un 30% a un 45% en las horas valle justificado por razones medioambientales , de seguridad y movilidad, son " de las mentiras más groseras que desde la administración se pueden crear para menoscabar un derecho fundamental como el de la huelga".

Por otro lado, el sindicato ha mostrado su solidaridad y apoyo a los trabajadores del metro y a la gestión del comité de huelga.

El sindicato niega que en la jornada de lunes hubieran problemas de seguridad y movilidad ni que hubieran más acumulaciones de pasajeros a las estaciones en relación a un día con servicio normal.

"La realidad es que los políticos catalanes y de Barcelona traen unos días comiendo, bebiendo y relacionándose con muchas de las personas más ricas del mundo y no pueden permitir que a la ciudad haya huelgas tan visibles y molestas", afirma CGT, que tilda también de "muy casual" que la administración justifique la medida por el alto grado de polución atmosférica.

Así mismo, CGT ha lamentado que 300 trabajadores sigan estando fuera de convenio y que la directiva tenga "salarios ocultos" y ha criticado el actual gobierno municipal de Barcelona, que "hasta hace poco hablaba de transparencia y de acabar con una TMB opaca y reducción de directivos".

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha asegurado que la huelga de los trabajadores del Metro debería responder a "pérdidas de derechos y cuando la otra parte no ofrece diálogo", y que este no es el caso de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB).

En un mensaje en la red social Facebook ha defendido el derecho de huelga "como un hecho fundamental y una conquista de los trabajadores" y que TMB ya ha ofrecido a sus empleados mejoras salariales, reducción de la temporalidad y mayor transparencia, por lo que critica la posición de los sindicatos, que considera de máximos.

"Para satisfacer estas demandas habría que subir tarifas o empeorar el servicio, o subir impuestos a la ciudadanía, cosa que no nos planeamos", ha argumentado.

Como ya hizo durante la jornada de huelga del lunes, ha criticado la protesta por "desproporcionada" y ha acusado los sindicatos de levantarse de la mesa de negociación.

En respuesta a las críticas que ha recibido acusándola de ponerse de parte de la patronal, ha respondido: "No soy propietaria de nada y he vivido casi toda mi vida en situación bastante precaria".

"Vengo de donde vengo y soy la misma persona", ha subrayado, aunque como alcaldesa tenga unas responsabilidades distintas de las que tenía anteriormente, ha explicado.

"Me mueve exactamente la misma voluntad que me ha movido siempre: hacer lo posible para trabajar por el bien común y mejorar la vida de la gente, sobre todo de la que más lo necesita", ha aseverado.

Colau ha reconocido que "no ha sido una semana fácil" para ella, pero asegura que ha "hecho todo lo posible" para evitar la huelga de metro en la ciudad y ha reconocido que es necesario "revisar y racionalizar la estructura directiva de TMB".

La consellera de la Presidencia, Neus Munté, ha asegurado que era "imprescindible" reforzar los servicios mínimos de la huelga de metro por cuestiones de "seguridad, movilidad y contaminación".

Así, ha subrayado que el Gobierno tiene la "responsabilidad" de mejorar la movilidad del Mobile World Congress y de los ciudadanos del área metropolitana, y ha insistido en la coincidencia con el episodio de contaminación, el cual ha afirmado que está "basado en informes solventes, avalados por el Departamento de Territorio y Sostenibilidad".

En cuanto a las declaraciones de la presidenta de Madrid, Cristina Cifuentes, postulándose para acoger el MWC, Munté ha respondido que el Gobierno "trabajará intensamente" por la continuidad del congreso en Barcelona hasta, como mínimo, el 2023. "Hay un acuerdo cerrado y los acuerdos se cumplen", ha espetado.

Durante una visita a las empresas presentes al Estand Catalonia del Mobile World Congress, Neus Munté ha explicado que el Gobierno decidió incrementar los servicios mínimos de la huelga de metro porque "cuestiones ambientales, de movilidad y seguridad lo aconsejaban", con el objetivo de conseguir "apaciguar" las molestias de los usuarios del transporte público. A la vez, pero, ha admitido que la medida no ha evitado que se hayan producido "dificultades" en la movilidad.

Ante las críticas de algunos sindicatos que han cuestionado la veracidad del episodio de contaminación, Munté ha defendido la "solvencia" de los informes que avalan la situación actual.

En este sentido, ha insistido en que se ha detectado la presencia de partículas de polvo proveniente del Sáhara que provocan un índice de contaminación que en algunas ciudades "excede los límites permitidos". "Esto obliga a determinadas recomendaciones", ha apuntado la consellera, que ha puesto como ejemplo el uso del transporte público.

Las vías de acceso en Barcelona han vuelto a registrar colapsos este miércoles por la mañana coincidiendo con la segunda jornada de huelga al metro, el alto índice de contaminación atmosférica y la tercera jornada del Mobile World Congress.

Según el Servei Català de Trànsit, pese a la alta afluencia de vehículos, esta ha sido menor que lunes, primer día de movilizaciones a TMB. Las vías con más problemas han sido las Rondas de Dalt y Litoral.

La primera ha llegado a tener retenciones a lo largo de todo su recorrido, entre Trinitat y Esplugues de Llobregat en sentido norte, a pesar de que a partir de las nueve de la mañana las colas se han reducido un poco, hasta los nuevo kilómetros entre Trinitat y Sarrià. En la Ronda Litoral, las retenciones han sumado diez kilómetros, entre la Barcelona y Bon Pastor, también en sentido Llobregat.

Otras vías que han presentado problemas ha sido la C-16 de acceso en Barcelona por los túneles de Vallvidrera y la Vía Augusta, con ocho kilómetros de cola, que a partir de las nueve se han reducido hasta los tres; junto con las retenciones de cada mañana a la C-58 a su paso por Sant Quirze del Vallès y Montcada i Reixac.

Por otro lado, en la B-23, en Esplugues de Llobregat y Sant Feliu de Llobregat, ha habido cuatro y cinco kilómetros de colas respectivamente y a la C-32 se han registrado seis kilómetros en Gavà y cuatro más en Cornellà de Llobregat.

Las retenciones se han producido el día siguiente que el Servei Català de Trànsit limitara la velocidad a 90 km/h en las vías con velocidad variable del área metropolitana de Barcelona debido a la contaminación atmosférica. Estas vías son la B-20, B-23, C-31, C-32, AP-2 y AP-7. Así mismo recomendó a los conductores que circularan a una velocidad máxima de 90 km/h al resto de vías del área metropolitana.

El director de Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Adrià Gomila, ha afirmado que el tráfico de vehículos en superficie en el lado Llobregat de la capital catalana se ha incrementado este miércoles en un 4% en relación en un día laborable normal.

Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña (FGC) ha transportado este miércoles, tercer día del Mobile World Congress, 15.718 personas hasta las doce del mediodía, el que representa un 154% más respeto un miércoles laborable habitual, según ha informado la compañía, que también ha explicado que el operativo se ha desarrollado sin incidencias ni aglomeraciones importantes.

El aumento de la afluencia en los Ferrocarriles de la Generalitat ha coincidido con la segunda jornada de huelga al metro de Barcelona.

Ante el segundo episodio de huelga de metro de Barcelona durante el Mobile World Congress, el AMB ha reforzado, desde primera hora de la mañana, el servicio de bus metropolitano para moverse en Barcelona y el área metropolitana, así como entre la ciudad, el recinto ferial y el aeropuerto.

Especialmente, el AMB ha reforzado el servicio de bus metropolitano del Baix Llobregat y del Barcelonès Norte. En este sentido, en el ámbito Besòs se ha duplicado el número habitual de vehículos de las líneas B19, B20, B24 y B25 que conectan Badalona, Santa Coloma de Gramenet y Sant Adrià de Besòs con Barcelona.

En el ámbito del Baix Llobregat, se han reforzado las líneas L94 y L95 en el tramo que une Plaza Cataluña y Plaza Europa/Feria, dada la gran afluencia en la zona del MWC; también se refuerzan las líneas L12 y L14 que conectan L'Hospitalet de Llobregat con la Avenida Diagonal de Barcelona.

Otro de los servicios que el AMB ha reforzado, de cara a los desplazamientos al aeropuerto, ha sido el Aerobús. De momento, este servicio se ha reforzado, para evitar aglomeraciones, con dos vehículos más, que se suman a los 16 vehículos que circulan a la T1 y los 7 vehículos de la T2. El Aerobús funciona, como es habitual, de 5.00h a 1.00h con una frecuencia de paso de 5 minutos y haciendo paradas a la Plaza España, Gran Vía-Urgell y Plaza Universidad.

Renfe ha reforzado la R" Norte al aeropuerto con 36.000 plazas adicionales.

Las retenciones que el lunes se registraron en los accesos a Barcelona y también en pleno centro de la ciudad por la suma de la huelga al metro, la lluvia y el inicio del MWC han hecho que muchos usuarios escarmentados hayan decidido este miércoles coger el metro. Es el caso de Xavi, que el lunes quiso esquivar los efectos de la huelga yendo en coche y se vio atrapado en largas colas.

La ampliación de los servicios mínimos lo ha acabado de convencer. "Hoy he decidido probar suerte con el metro porque habían anunciado que a las horas punta aumentarían la frecuencia de paso del metro". Sin embargo, ha salido más temprano de casa del habitual para evitarse sustos y llegar a tiempo al trabajo.

Igual que ha hecho Anna, una oficinista de Paseo de Gràcia. "El lunes viví el colapso del tráfico, porque opté por el autobús. Como tardó mucho rato, hoy vengo en metro. No he tenido que esperar demasiado y lo he cogido a la hora", explica antes de entrar al trabajo a las ocho y media de la mañana.

Roberto ha sido fiel al metro tanto el lunes como este miércoles, a pesar de las convocatorias de huelga, y dice que está notando los efectos. "Habitualmente a esta hora pasan cada 2-3 minutos, ya ha pasado este rato y todavía no ha llegado el metro, así que ya estoy notando la diferencia respecto de otros días", relata.

El aspecto de los andenes de las estaciones céntricas del metro de Barcelona se ha visto teñido de acreditaciones del Mobile, maletines y maletas. La mayoría de viajeros de las líneas que conectan en plaza España con los Ferrocarriles hacia el Hospitalet son congresistas. Phil, un británico participando del MWC, está sorprendido con el alta frecuencia de convoyes del metro. "Los paneles indican que llega en 2 minutos y 51 según, es una agradable sorpresa. Iba a coger el bus pero le he dado una oportunidad al metro y bien es verdad que la huelga no me está afectando", expresa.

Este congresista se enteró de la parada al subterráneo cuando aterrizó en Barcelona. "Es una lástima que haya huelga coincidiendo con un acontecimiento tan grande para la ciudad como el MWC, pero no sé los motivos que lo han originado así que tampoco puedo opinar demasiado", reconoce.

Johanna trabaja estos días en el recinto ferial como huésped y también se ha decantado por el metro para acceder. Es a la salida de la jornada de trabajo cuando más sufre los efectos de la parada al transporte públicos. "A las siete de la tarde cierran el Mobile, todos salimos a la misma hora y el metro va muy lleno", se queja.

Otros viajeros, sin embargo, están más preocupados por la huelga que este viernes se vivirá a la Renfe que por la del metro. "Tendremos que buscar otras maneras de llegar a Barcelona", augura, a la vez que asegura que el lunes se encontró con unos convoyes de metro muy cargados de gente, más que este miércoles.