El Observatorio Económico de Andalucía (OEA) ha realizado una revisión a la baja del crecimiento del PIB en Andalucía para este 2016 y lo ha situado en una horquilla del 2,0 por ciento y el 2,8 por ciento, con una media del 2,3 por ciento, lo que supone bajar cuatro décimas a la estimación realizada en noviembre del pasado año.

Así lo ha reflejado en el Informe del cuarto trimestre de la economía andaluza y la estimación en tiempo real del primer trimestre de 2016, presentado este jueves.

Según han señalado, 2016 ha comenzado con "importantes incertidumbres" para la economía mundial y europea. A la debilidad mostrada por la mayoría de los países emergentes, algunos de ellos en clara recesión, hay que unir las consecuencias en los mercados financieros de la caída de los precios de las materias primas.

Además, han señalado la desconfianza que los inversores muestran por la banca europea que puede acarrear "importantes dificultades para la Zona Euro a lo largo del curso actual".

A los riesgos externos, el OEA ha apuntado que hay que sumar en España la dilación en la formación de gobierno así como la posibilidad de una nueva cita electoral que no termine por aclarar el futuro político.

Cuarto trimestre

El Observatorio Económico de Andalucía ha detallado que, en el cuarto trimestre de 2015, el crecimiento de la economía andaluza ha sido "similar al estimado para el trimestre anterior".

El crecimiento interanual del cuarto trimestre fue del 3,7 por ciento, dos décimas superior al crecimiento del PIB español, y para el conjunto de 2015, el crecimiento medio se ha estimado en un 3,3 por ciento, una décima más que en España (3,2%).

Las razones que explican el crecimiento de la economía andaluza son las mismas que se señalaron para los primeros tres trimestres del año. Entre las razones internas, se puede destacar la demanda, que sigue mostrando "una gran vitalidad, impulsada tanto por el consumo, gracias a la mejora del empleo y las expectativas, como por la inversión".

Entre las externas, persiste la evolución favorable del precio de crudo, así como del consumo externo, especialmente representado por el turismo. Además, la política monetaria expansiva del Banco Central Europeo permite, un trimestre más, aprovechar el abaratamiento del crédito y el debilitamiento del euro.

DEMANDA

El OEA ha señalado que las estimaciones de la Contabilidad Regional Trimestral de Andalucía para los tres primeros trimestres de 2015 muestran el papel protagonista de la demanda interna en el crecimiento de la región. En particular, el consumo de las familias y la formación bruta de capital han sido los dos principales impulsores de este crecimiento.

Según los indicadores coyunturales que se disponen hasta el momento, como son matriculaciones de vehículos, comercio minorista, actividad de los servicios y producción industrial de bienes de equipo, esta tendencia ha continuado durante al menos el último trimestre de 2015.

"No parece pues, de momento, desprenderse del análisis de estos componentes debilidad alguna que pueda afectar al conjunto de la economía andaluza".

Por el contrario, tanto exportaciones como importaciones muestran cierta tendencia negativa comparada con los trimestres precedentes. Sin embargo, el conocimiento de los flujos comerciales de Andalucía con el exterior y el resto de España es muy limitada, por lo que "la evolución de tales partidas solo ofrece una visión parcial de la verdadera aportación del sector exterior a la economía regional".

No obstante, apunta que "tanto las exportaciones como las importaciones muestran tendencia a la baja, muy posiblemente influenciados por la industria del refino, ya que esta explica un porcentaje elevado de la evolución de estos agregados".

Según el OEA, merece la pena destacar sin embargo la aportación al crecimiento del sector turístico regional. Todos los indicadores muestran crecimientos significativos, y, tanto las pernoctaciones como los viajeros o el transporte aéreo de pasajeros aumentan entre el ocho y el diez por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.

La buena coyuntura económica en los principales países de origen de los turistas que visitan Andalucía, la inestabilidad política de algunos de los destinos turísticos con los que Andalucía compite, así como el esfuerzo por cierta desestacionalización de la temporada turística, serían las principales explicaciones.

OFERTA

Por el lado de la oferta, los servicios siguen explicando gran parte del crecimiento regional, especialmente el comercio, con aumentos que rondan entre el tres y el cuatro por ciento interanual, aunque ligeramente más débil que en los meses de verano.

En cuanto a la industria andaluza, aún parece ajena a las amenazas de la caída del comercio internacional, aunque podrían afectarle en los próximos meses. Así, el crecimiento de la producción industrial andaluza aumentó de media entre el 4,5 y el cinco por ciento interanual durante el último trimestre del año.

Por último, la construcción prosigue con su recuperación, aunque con menor crecimiento que en el primer tramo del año 2015, principalmente explicado por la caída de la licitación oficial.

I

Trimestre de 2016

Para el primer trimestre de 2016, la inercia prosigue, ya que durante las últimas semanas de 2015 los indicadores mostraron aumentos que superaron las predicciones. Las estimaciones de crecimiento tanto para el cuarto trimestre de 2015 como para el primer trimestre de 2016 han sido corregidas al alza durante el mes de diciembre y enero.

Sin embargo, y de nuevo, las amenazas al crecimiento, tanto externas como internas, hacen prever un crecimiento ligeramente inferior para el primer trimestre de 2016, aunque de momento se estima una corrección moderada, tan solo hasta el 0,8 por ciento.

Así, el OEA ha destacado la debilidad de los mercados emergentes, de nuevo con epicentros en las economías de China o Brasil, el agotamiento del impulso derivado de la caída del precio del crudo, la corrección durante las primeras semanas de los mercados financieros y, desde finales de 2015, la incertidumbre política en España.

Cabe señalar, en este sentido, que los indicadores de confianza publicados para el mes de enero, tanto empresarial como de los ciudadanos, han caído con fuerza comparado con los de meses anteriores.

AÑO 2015

El Observatorio Económico de Andalucía ha considerado 2015 como "un año de recuperación de la economía andaluza", pues la tasa de crecimiento para el conjunto del año fue del 3,3 por ciento, muy superior a la previsión realizada a principios de año.

Las cifras de ocupación y desempleo confirman esta buena tendencia, pues el año cerró con un aumento medio del número de ocupados del 5,1 por ciento en Andalucía frente a un tres por ciento en España, con caídas similares del desempleo, -9,2 y -9,8 por ciento, respectivamente.

Todos los componentes de la demanda y de la oferta han participado positivamente en este crecimiento, aunque ha hecho hincapié en la recuperación del consumo privado y de la inversión (tanto en bienes de equipo como por la construcción).