Dell anunció hace unos meses que vendería ordenadores con Linux preinstalado. El pasado mayo comenzó a vender tres modelos en EE UU.
Ahora Lenovo, la compañía que adquirió la división de ordenadores de IBM, va a seguir sus pasos.
Lo ha anunciado durante la feria LinuxWorld que se desarrolla esta semana en San Francisco.
En su día, la decisión de Dell recibió muchas alabanzas por parte de los usuarios defensores del código abierto, aunque fue vista como una medida oportunista por muchos otros.
Con esta decisión, Lenovo se convierte en el segundo fabricante que comienza a vender portátiles con Linux preinstalado de forma masiva. La compañía espera lanzar estos ordenadores a finales de año.
Novell le acompañará en esta nueva andadura, adaptando el sistema operativo a los ordenadores.
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