Investigadores de la UPO inducen sensaciones táctiles artificiales con corrientes eléctricas en el cráneo

Científicos de la División de Neurociencias han conseguido usar con éxito este tipo de estimulación no invasiva
Investigadores de la UPO
Investigadores de la UPO
EUROPA PRESS/UPO
Investigadores de la UPO

Investigadores de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) de Sevilla han logrado inducir sensaciones táctiles artificiales similares a las producidas de forma natural mediante la aplicación de corrientes eléctricas a través del cráneo.

En un comunicado, la Olavide ha informado de que los animales entrenados para responder a estímulos táctiles aplicados en los bigotes, no mostraron diferencias en sus respuestas cuando los estímulos naturales fueron sustituidos por la aplicación de corrientes eléctricas transcraneales a determinadas frecuencias. Este estudio acaba de publicarse en Scientific Reports.

Durante las últimas décadas, los neurocientíficos e ingenieros han trabajado en el desarrollo de sistemas biomédicos no invasivos que permiten usar las señales derivadas del cerebro para controlar dispositivos externos. Esta tecnología, denominada interfaz cerebro-ordenador, ha sido aplicada de forma exitosa en la rehabilitación neurológica, la comunicación directa con dispositivos electrónicos o el control de prótesis robóticas.

No obstante, para alcanzar el máximo potencial de esta tecnología, es necesario el desarrollo de herramientas no invasivas que permitan a los ordenadores comunicarse con nuestro cerebro. Aunque los implantes corticales han demostrado ser de gran utilidad para este propósito, su carácter invasivo limita enormemente su uso en pacientes, según han señalado.

En los últimos 15 años se ha demostrado que las corrientes de baja intensidad aplicadas a electrodos situados sobre la piel de la cabeza puede modificar la actividad de las neuronas cerebrales situadas bajo dichos electrodos, según apuntan.

Un equipo de científicos de la División de Neurociencias de la UPO ha conseguido usar con éxito este tipo de estimulación no invasiva para inducir sensaciones táctiles artificiales en un grupo de animales.

Los experimentos demuestran que la aplicación transcraneal mediante corriente alterna sobre la corteza sensorial es capaz de inducir sensaciones táctiles artificiales. Los animales que asociaron este tipo de sensaciones artificiales a determinadas respuestas motoras (como el cierre del párpado) respondieron de forma condicionada a la presentación de los estímulos táctiles naturales, indicando que percibieron ambos tipos de estímulo de forma similar. Del mismo modo, los animales entrenados para responder a estímulos naturales continuaron haciéndolo cuando estos fueron sustituidos por los artificiales.

La importancia de estos experimentos radica, según indica la UPO, en la posibilidad de aplicar corrientes eléctricas —una tecnología económica, portátil e indolora— para inducir estímulos sensoriales, sugiriendo su posible aplicación en la interacción cerebro-ordenador en humanos.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento