El delegado de Salud, Seguridad y Emergencias de Madrid, Javier Barbero, ha explicado este martes en la comisión del ramo que han decidido "paralizar" el proyecto de la Ciudad de la Seguridad porque son contrarios a montar "un medio Pentagonillo", un "minibunker" en plena Casa de Campo, un espacio histórico protegido que debe enfocarse más a otros usos, como el cultural y el deportivo.

"Me importa más la seguridad de la ciudad que la Ciudad de la Seguridad", ha defendido el delegado, que ha arremetido contra el proyecto del PP, que ha definido como "megalómano, como los que ha padecido la ciudad en los último años". Se paraliza la Ciudad de la Seguridad porque "no tenía demasiado sentido" y porque no se corresponde con el modelo de policía que quieren para Madrid.

Barbero ha declarado que no trabaja "a golpe de megaproyecto, de una ciudad marca". "A la Casa de Campo le espera un futuro mejor", ha asegurado el concejal.

El anterior Gobierno municipal encabezado por Ana Botella (PP) pretendía con este proyecto "concentrar todos los servicios centrales para facilitar la comunicación y la rapidez de las respuestas".  El complejo albergaría a un millar de trabajadores que operan en dependencias municipales de la calle Albarracín (sede de Movilidad), la del Plomo (Atestados de Tráfico) y la avenida del Mediterráneo (Dirección de Emergencias y Protección Civil).

Pese a la inversión prevista de 12,7 millones de euros, el Ayuntamiento de Botella aseguró que la operación urbanística le reportaría un "ahorro de más de 5,3 millones", ya que se evitará el pago de los alquileres de los inmuebles que hasta ahora ocupaban esos funcionarios.