La Fundación Atarazanas exige, "con carácter de urgencia", la paralización del proyecto del arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra para convertir las Reales Atarazanas de Sevilla en un centro cultural y "su reconducción hacia un nuevo rumbo de sensatez y armonía", así como una recuperación de la cota original del sistema espacial que ordena el conjunto.

En un comunicado, la fundación expone que en los dos últimos años ha mostrado "su total compromiso y colaboración" con la Consejería de Cultura, la Caixa y el Ayuntamiento de Sevilla para que el proyecto de rehabilitación fuera "riguroso, participativo y transparente", toda vez que afirma que durante todo este tiempo se les prometió, por parte de las citadas instituciones, que "se contaría en todo momento con la participación y experiencia de la fundación así como con la de reputados expertos independientes en materia de patrimonio para llevar a cabo un trabajo profesional y adecuado a la naturaleza del bien monumental".

Sobre todo, señala la fundación, "se hacía hincapié en la necesidad de la recuperación integral de la fabulosa arquitectura original de los astilleros medievales, enterrados bajo cinco y medio metros de tierra y escombros", una circunstancia "transcendental" para una verdadera restauración integral del edificio que siempre "nos fue prometida y avalada desde la propia Consejería de Cultura, por consejeros, viceconsejería y desde Secretaría General Técnica, así como desde otras instancias políticas y también desde la Caixa".

Sin embargo, y después de dos años de "inexplicada ralentización" del proyecto, la fundación denuncia que éste se ha llevado a cabo con "un total secretismo y alejado de cualquier participación ciudadana o profesional ajena al equipo del arquitecto Vázquez Consuegra"

Así las cosas, apunta que tras una "larga y dificultosa" espera ante la consejería y el ayuntamiento para poder evaluar y opinar con criterio acerca del proyecto ejecutado para la creación de un nuevo centro cultural en las Atarazanas, esta fundación tuvo ocasión recientemente de analizar —aún de forma muy restringida— el citado proyecto junto a destacados expertos en materia de rehabilitación arquitectónica y patrimonial.

El monumento,

En "peligro inminente"

Tras ello, la fundación manifesta "el peligro inminente" en que se encuentra este monumento, ya que asegura que en proyecto de Vázquez Consuegra "no hay prevista ninguna actuación restauradora", sino que, explícitamente, se menciona la construcción de un nuevo centro cultural que afecta básicamente al área de cabecera y las plantas superiores del edificio dieciochesco de la Real Maestranza de Artillería.

Además, lamenta que se mantiene voluntariamente semienterrada toda la zona gótico mudéjar de los astilleros medievales, un enterrramiento, "inverosímil y letal, que contraviene todo tipo de normativas y directrices nacionales e internacionales", y que "junto a la alteración caprichosa de sus cerramientos y accesos supone una grave pérdida del sentido y función original del Edificio, catalogado como BIC, y lo hará definitivamente incomprensible ante la ciudadanía como el gran astillero que fue durante toda la Edad Media".

Asimismo, critica que a pesar de las múltiples solicitudes realizadas por esta fundación y por otras organizaciones en defensa del patrimonio para conocer el proyecto, "en ningún momento se ha tenido información del mismo ni se ha contado para su elaboración con la participación de la ciudadanía", ni "tampoco se ha tenido en cuenta la ejecución de un Plan Especial, claramente recomendado por la normativa vigente de 23 de diciembre de 1992, mediante el convenio entre el ayuntamiento y las consejerías de Cultura y Medio Ambiente, que incluía un planeamiento de protección por zonas con características históricas".

Del mismo modo, frente a la exigencia de la normativa arqueológica en los casos que afectan a edificios históricos, según la fundación en el presente proyecto "no existe un plan arqueológico previo ni se han realizado las catas adecuadas para un seguimiento específico de la lógica del subsuelo, tanto en el área de las naves mudéjares como en la zona de la muralla y su barbacana", mientras que, por el contrario, se escenifica una nueva plaza, "tan chocante como absurda, que no solo entierra definitivamente la hermosa arquitectura que nuclea y organiza el edificio medieval, sino que además escamotea deliberadamente el importante e identitario componente fabril original del edificio como arsenales de galeras".

En tanto proyecto de construcción "ex novo", añade la Fundación Atarazanas, sus responsables parecen "ignorar no sólo la amplia lista de normativas, directrices, ordenanzas y recomendaciones que existen a nivel nacional e internacional en materia de conservación, protección y restauración de monumentos, sino también el informe de viabilidad que encargó la propia Consejería de Cultura en el año 2007 al IAPH y que concluía con un heteredoxo aunque contundente lema que dice 'No todo vale en Atarazanas'".

Así las cosas, la fundación propone una "urgente presentación pública" del proyecto y la creación de un Foro plural abierto a la ciudadanía con la participación de expertos en arquitectura, arqueología, historia y antropología patrimonial, así como "reconducir y plantear" el proyecto desde un enfoque participativo y multidisciplinar, "evitando las ensoñaciones y fantasías de arquitectos estrellas que sólo entrañan riesgos de mistificación arquitectónica y patrimonial".

La fundación apuesta también por la recuperación de la cota original del sistema espacial que ordena el conjunto, ya que "en tanto documento histórico y de memoria comunitaria con cerca de 800 años, es preciso desvelar la dimensión vertical de la construcción y permitir que hable el edificio tras 500 años de silencio", y por investigar y conocer la evolución general del solar y del edificio —subsuelo y alzados—, contemplar las actividades arqueológicas en el control de los movimientos de tierras y seguimientos de obras a fin de continuar con la documentación del inmueble y completar el conocimiento del mismo con sondeos puntuales.

Igualmente, los expertos exigen al ayuntamiento el cumplimiento de la Moción Municipal de 15 febrero de 2007, que fue aprobada en Pleno por unanimidad de todos los grupos políticos del momento, y en la que se insistía (según el Acuerdo Primero) en 'La recuperación y revalorización de las Reales Atarazanas de Sevilla, en tanto espacio simbólico de primer orden, como factor primordial de protección y afianzamiento del edificio, y de la memoria histórica colectiva asociada al monumento y a la identidad territorial'.

Exige la gestión pública de las atarazanas

Exigen, además, "tras los continuos fiascos y frustraciones de los últimos años", la gestión pública de las Atarazanas y la creación de un consorcio entre instituciones, participado también por la sociedad civil. Exigen igualmente que la Caixa, en tanto concesionaria del monumento, "cumpla sin demora su deuda y compromiso con Sevilla abonando el dinero necesario para las obras de restauración —10 millones de euros—, al tiempo que reconsidere el proyecto actual y evite un nuevo atentado contra el patrimonio de la ciudad, ya muy dañado por anteriores intervenciones, como el de la Torre Pelli".

Por último, pide con "urgencia" la paralización del proyecto y "su reconducción hacia un nuevo rumbo de sensatez y armonía", o, de lo contrario, "nos veremos obligados a ejercer nuestro derecho a denunciar esta gravísima actuación ante las instancias jurídicas y patrimoniales de organismos como la Subdirección General de Protección de Patrimonio Histórico y también internacionales como la Unesco y el Icomos, entre otros", concluye.