Tonteos, besitos, coqueteoz, una botella de cava que compartieron con un grupo de amigos a bordo de un yate... A Eugenia, la ex mujer de Francisco Rivera, la vida le sonríe. Las imágenes de lujo, pasión y glamour de la duquesa de Montoro publicadas por la revista "Cuore" no pueden ser más explícitas.

Eugenia parece haber olvidado ya por completo a su amor intermitente, Gonzalo Miró, tertuliano en "Las Mañanas de 4", el programa que dirige y presenta Concha García Campoy.

El hombre junto al que ha sido fotografiado, de unos 40 años, exhibe una figura atlética. Es moreno, alto y no se depila el pecho.

Los agoreros afirmaban que Eugenia volvería a los brazos del hijo de Pilar Miró. No parece que haya vuelta atrás tras la publicación de estas imágenes.

Se dice que la gota que colmó el vaso en una relación que hacia aguas por culpa del fuerte carácter de Eugenia fue el viaje en solitario de ésta a Cancún, con motivo de la boda de otro de sus ex, Colate, con Paulina Rubio.

Eugenia, a sus 38 años, tras su separación de Fran Rivera en el 2002 tras cinco años de matrimonio ha aprendido a superar las crisis sentimentales con rapidez.

A Eugenia siempre, por lo general, le han gustado los hombres más jóvenes que ella. Durante su largo noviazgo intermitente con Fran, mantuvo una breve relación con Miguel Báez, Litri. Su nombre también fue vinculado al de Rosauro Varo, amigo a su vez de Vicky Martín Berrocal.

Siempre se ha dicho que Fran Rivera, actualmente unido a la prima de Eugenia, Blanca Martínez de Irujo, ha sido el hombre de su vida. Eugenia tardó mucho en reponerse. La violenta reacción que tuvo hace tres años en el funeral de Carmina Ordóñéz hace tres años al enterarse de que salía con Carla Goyanes demostró que aún no había olvidado al torero.

Tras la separación definitiva de Fran estuvo saliendo con Colate y después llegó Gonzalo Miró, la relación más seria que ha tenido hasta ahora tras su tormentoso matrimonio con Francisco Rivera Ordóñez.

Apasionada e independiente , enemiga de los convencionalismos, Eugenia, un personaje de primera en las revistas del corazón, puede seguir dando mucho que hablar. Vive, habla y obra como su madre.