El Fiscal ha pedido nueve años de cárcel para un individuo acusado de un delito de homicidio por asestar tres puñaladas a su casero cuando éste le advirtió que debía abandonar la habitación que ocupaba por el impago del alquiler, según el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio público al que ha tenido acceso Europa Press.

De no haber sido atendido con urgencia, la víctima habría sufrido un shock hipovolémico por hemorragia y una peritonitis aguda por la perforación intestinal que habrían ocasionado su fallecimiento, según el Ministerio Fiscal.

El juicio está previsto para este miércoles, 13 de enero, a las 10.30 horas en la Sección número 3 de la Audiencia Provincial de Murcia.

En concreto, los hechos se remontan a las 19.00 horas del 12 de junio de 2014, cuando el acusado A.M.M.R., nacido en la República Dominicana y sin antecedentes penales se encontraba en una vivienda de la carretera de la Fuensanta de Murcia, donde ocupaba una habitación que le había sido realquilada por la víctima.

El casero acudió a la vivienda para advertir a su inquilino que no había abonado la cantidad comprometida por el alquiler y los consumos correspondientes, por lo que debía abandonar la casa.

La visita se volvió a repetir ese mismo día a las 23.00 horas, pero en esta ocasión, el inquilino aguardaba pertrechado de un cuchillo jamonero de unos 20 centímetros de largo y, nada más entrar en la vivienda, se abalanzó sobre el casero "de forma sopresiva y movido por el ánimo de acabar con su vida".

En un primer momento, la víctima sufrió una herida incisa de unos dos a tres centímetros y, cuando trataba de retirarse, recibió otras dos cuchilladas, una que le ocasionó una herida de tres centímetros de profundidad en el hombro izquierdo y otra en la cadera derecha.

El agredido abandonó la casa por su propio pie, siendo recogido en su camino al hospital Reina Sofía por un servicio de ambulancia que le trasladó hasta el centro sanitario, donde recibió asistencia médica.

Una vez que la víctima abandonó la casa, el acusado abandonó el domicilio junto a su hijo y con el arma indicada para presentarse, a continuación, en la Comisaría de El Carmen, donde manifestó a los agentes de servicio que alguien quería matarle.

Por estos hechos, el Fiscal considera que procede imponer al acusado la pena de nueve años de prisión, la prohibición de acercarse a la víctima a su domicilio, lugar de trabajo o cualquiera que frecuente a menos de 300 metros y de entrar en comunicación con él por cualquier medio durante un periodo de cinco años superior al de la pena privativa de libertad.

En concepto de responsabilidad civil, el Fiscal solicita que el acusado abone a la víctima una indemnización de 2.605 euros por las lesiones y de 10.308 euros por las secuelas.