Los presos condenados a cumplir medidas alternativas a la cárcel han aumentado un 50% durante el primer trimestre de 2007. De esta forma, han superado ya los 7.500 reclusos, cuando en las cárceles catalanas hay un total de 9.395 encarcelados.

Estos son algunos de los datos que rebela el boletín estadístico penitenciario correspondiente al primer semestre del año y que ha presentado esta mañana la consellera de Justícia, Montserrat Tura.

Entre enero y junio de este año, 5.083 condenados han estado cumpliendo medidas alternativas a la cárcel. Esto supone que en este período se han realizado 5.811 trabajos en beneficio de la comunidad. En 2006 fueron 3.397, un 50,12% menos.

En lista de espera hay, además, 2.464 personas, que suponen el 29,77% del total. El objetivo del departamento de Justícia, según ha expuesto Tura hoy, es que no se supere nunca el 30% del total de condenados a medidas penales alternativas.

Como en boletines anteriores, el informe del primer semestre de 2007 evidencia el aumento de la población penitenciaria catalana. En esta ocasión ha crecido un 5,4%, mientras en 2006 aumentó en un 6,7%.