La Comisión Europea (CE) presentó hoy nuevas medidas para criminalizar la financiación del terrorismo, los viajes con fines terroristas y el adiestramiento pasivo, así como para combatir el tráfico de armas de fuego y explosivos, con vistas a prevenir atentados como los de París.

"Nuestras propuestas van dirigidas no solo a los que cometen atrocidades terroristas, sino también a aquellos que ayudan con los viajes, la financiación o apoyan el terrorismo", señaló el comisario europeo de Interior, Dimitris Avramopoulos.

Las nuevas medidas sobre terrorismo están contenidas en una directiva, que aún tiene que ser aprobada en el Consejo y el Parlamento Europeo, mientras que las recomendaciones específicas sobre armas de fuego y explosivos forman parte de un plan de acción que no tiene carácter obligatorio.

"El aumento en el número de ciudadanos de la UE que viajan al exterior para convertirse en 'combatientes extranjeros' significa que se necesita una actualización del marco comunitario sobre ofensas terroristas para asegurar una respuesta común de la justicia penal", indicó, por su parte, el vicepresidente primero del Ejecutivo comunitario, Frans Timmermans.

Timmermans destacó también que se precisa cooperación tanto a nivel de la UE como con países terceros para acabar con el mercado negro de armas de fuego y explosivos.

La nueva directiva actualiza las normas comunitarias actuales para recoger esta nueva forma de terrorismo integrista y propone, entre otras cosas, que a partir de ahora se consideren delito a escala europea los viajes con fines terroristas, tanto dentro como fuera de la UE, la financiación, organización y facilitación de esos viajes y otras acciones terroristas, y el adiestramiento pasivo.

Algunos Estados miembros ya han modificado su respectivas legislaciones nacionales para responder mejor a la amenaza que representan los llamados "lobos solitarios" dentro del terrorismo yihadista.

España aprobó el pasado 1 de julio la reforma del Código Penal y tiene pendiente para el próximo 6 de diciembre la entrada en vigor de la nueva Ley de Enjuiciamiento Civil, precisamente para recoger estos aspectos.

El plan de acción sobre armas de fuego y explosivos ofrece directrices a los Estados miembros en una materia que es competencia nacional exclusiva y completa la medidas que ya presentó Bruselas el pasado 18 de noviembre para reforzar el control de armas, como los kaláshnikov utilizados en París, y coordinar en la UE su desactivación para que no puedan ser reutilizadas.

Las nuevas recomendaciones se centran en la restricción del acceso a las armas de fuego ilegales y explosivos, para lo que se invita a los países de la UE a que establezcan puntos nacionales conectados para mejorar el análisis y el intercambio de información y se propone el refuerzo del papel de Europol en materia de tráfico en línea.