La Policía Municipal de Madrid contará en 2016 con 162 nuevos efectivos, según ha anunciado este miércoles el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero. Se trata de la primera vez en los cinco últimos años que el Ayuntamiento de la capital contará con nuevos funcionarios para estas labores, ya que desde 2010 no se han producido nuevas incorporaciones. El proceso fue iniciado en 2014 por el Gobierno municipal de Ana Botella (PP). Anteriormente, la última convocatoria se produjo en 2009, con 358 plazas.

Sin embargo, este número no cambiará sustancialmente nada en el cuerpo debido a que la media anual de jubilaciones ronda los 150 efectivos. Es decir: que la Policía Municipal contará en 2016 con solo 12 nuevos agentes. "Necesitamos incorporar al menos 300 nuevos policías, sin contar con las jubilaciones anuales, que también habría que cubrir porque de lo contrario estamos en las mismas", han explicado desde Comisiones Obreras. Y es que el cuerpo municipal ha reducido su tamaño un 10% durante la pasada legislatura (2011-2015). En concreto, la plantilla ha perdido casi 700 agentes. Actualmente hay 6.169 policías municipales en la capital, lo que supone un 10% menos de efectivos que al comienzo de la legislatura (6.858), según datos del censo electoral de los últimos comicios sindicales, celebrados el pasado 28 de abril.

Las consecuencias de esta política de reducción de plantilla las han sufrido los vecinos, que ven como muchas de sus quejas caen en ocasiones en el olvido. "Muchos comunicados se quedan pendientes porque no los podemos atender y a otros pasa mucho tiempo hasta que llegamos", reconocen desde CC OO, que, sin embargo, aclaran que "esto no sucede en las incidencias graves (reyertas, atracos, robos...) porque siempre se prioriza". "Estamos hablando sobre todo de ruidos que molestan a los vecinos procedentes de pisos particulares, de la calle o locales de ocio nocturno", han precisado fuentes policiales del sindicato CSIT. "Estos recortes perjudican a la seguridad de los ciudadanos. Si antes acudían dos coches a un aviso grave ahora solo va uno", han añadido.

La reducción de personal se ha producido sobre todo en las unidades de distrito, piezas clave para garantizar la seguridad ciudadana a pie de calle, y ha afectado a la periferia. "Las unidades de distrito de algunos distritos de la periferia como Vallecas, Vicálvaro, Usera o San Blas-Canillejas tienen unas necesidades brutales. Además, estamos hablando de agentes que pueden realizar multitud de funciones: desde regular el tráfico hasta realizar una inspección industrial", ha señalado el sindicato obrero. A esto hay que añadir otra problemática como el envejecimiento de la plantilla, cuya edad media ronda los 43 años frente a los 35 de la legislatura 2007-2011.

Javier Barbero también ha confirmado que el próximo año los policías municipales de Madrid cambiarán su uniformidad con trajes "más ergonómicos" y con "los últimos avances en tecnología", para los que el Ayuntamiento de Madrid destinará una partida presupuestaria de tres millones de euros. Además, todos los agentes dispondrán de chalecos antibalas individuales. Su coste será de dos millones de euros.