La Fiscalía de Málaga ha iniciado diligencias de investigación a raíz del fallecimiento de un bebé de 15 días por tosferina el pasado mes de octubre en la capital, con el fin de analizar si hay indicios de delito o no.

Esto se produce después de que la asociación privada El Defensor del Paciente pusiera en conocimiento del ministerio fiscal este caso y solicitara que se abriera una investigación al respecto.

Desde dicho colectivo indicaron en su momento que ante este caso "estamos en el deber de solicitar una investigación de oficio y depuración de responsabilidades de quienes tienen el deber de cuidar de la salud". Así, consideraron que las vacunas "deben ser obligatorias, gratuitas y se debe informar a los padres al respecto". Criticaron que "no haya existencias en las farmacias" y que durante el embarazo "la madre fuera a un centro de salud y no se la pusieran".

El bebé ingresó el 16 de octubre en el Hospital Materno Infantil de Málaga capital y falleció cuatro días después a raíz de las complicaciones provocadas por la enfermedad, según indicaron desde la Delegación Territorial de Salud de la Junta de Andalucía, que descartaron un brote.

El niño, debido a su corta edad, con sólo 15 días de vida, aún no se encontraba inmunizado, ya que la primera vacuna se administra a los dos meses. Este pasado martes se conoció que otro bebé murió por tosferina el pasado mes de septiembre en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla.

Tras este fallecimiento, el consejero andaluz de Salud, Aquilino Alonso, señaló que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) incorporará la vacuna contra la tos ferina en mujeres embarazadas a partir del próximo 1 de enero de 2016. Asimismo, el Ministerio de Sanidad ha anunciado este mismo miércoles que han adquirido 60.000 vacunas para que "lleguen a todo el mundo".