Al menos 16 personas murieron en los hechos de violencia que estallaron el martes en la mezquita tras meses de tregua entre las autoridades y un movimiento de estilo talibán que está apostado en Lal Masjid, o Mezquita Roja.

También se han escuchado disparos. Las tropas que rodean la mezquita han obligado a los periodistas desplazados en la zona a recular.

Huida y arresto vestido de mujer

El clérigo radical Abdul Aziz, líder de la denominada Mezquita Roja de Islamabad, fue detenido ayer por las fuerzas de seguridad que asediaban el templo cuando intentaba huir ataviado con un burka, mientras que 1.000 de sus seguidores, en su mayoría estudiantes, se vieron obligados a rendirse.

El presidente paquistaní, el general Pervez Musharraf, ordenó el despliegue de cientos de tropas, que rodeaban el templo desde ayer, martes, lo que convirtió el lugar en un escenario de violentos enfrentamientos entre los estudiantes leales a Aziz y las fuerzas del Gobierno. Un total de 16 personas han muerto y cerca de un centenar han sufrido heridas, según las autoridades.

El clérigo fue arrestado por agentes femeninos al intentar cachearle cuando trataba de abandonar la mezquita vestido con un burka negro que le cubría de la cabeza a los pies. También fue detenida Umme Hassam, la esposa de Aziz, al intentar defender a su marido.

Ayer por la mañana, uno de los líderes de la Mezquita Roja, Abdul Rashid Ghazi, dijo que estaba preparado para negociar con el Gobierno, pero añadió que se seguirían defendiendo. Sin embargo, el Ejecutivo advirtió de que no dialogará con los clérigos radicales.

En cuanto a los estudiantes, "no tenían otra opción que rendirse", según afirmó Javed Iqbal Cheema, un portavoz del Gobierno. Por su parte, el viceministro de Información, Tariq Azim, indicó que las mujeres y los niños tendrían garantizada la amnistía, pero que los hombres involucrados en asesinatos y otros crímenes se enfrentarán a acciones legales.