Cae una red de compraventa de metales preciosos en España: 30 detenidos en tres ciudades

  • Las investigaciones comenzaron en diciembre de 2013 en Cantabria, tras ser presentada una factura con irregularidades.
  • Se les imputan delitos de receptación, falsedad documental, blanqueo de capitales y contra la Hacienda Pública por un fraude superior a los 2,5 millones de euros.
  • Los agentes han incautado cerca de media tonelada de oro y plata, más de 476.000 euros en efectivo y activos financieros blanqueados.
  • Cuadraban la contabilidad con facturación falsa para justificar las transferencias de dinero entre empresas.
  • En el dispositivo han participado más de 150 agentes.
Dinero en efectivo incautado por la Policía Nacional.
Dinero en efectivo incautado por la Policía Nacional.
POLICIA NACIONAL
Dinero en efectivo incautado por la Policía Nacional.

Una operación conjunta de la Policía Nacional y de la Agencia Tributaria, iniciada en Cantabria, ha permitido desarticular una trama de fraude en la compraventa de metales preciosos.

Han sido detenidas un total 30 personas relacionadas con una red de empresas diseñadas para justificar la procedencia de metales preciosos obtenidos ilegalmente. De ellas, 22 estaban en Madrid, cuatro en Barcelona, y otras cuatro más en Córdoba.

A los arrestados se les imputan delitos de receptación, falsedad documental, blanqueo de capitales y contra la Hacienda Pública por un fraude superior a los 2,5 millones de euros. Los agentes han registrado 20 empresas, domicilios y establecimientos en los que se han incautado de cerca de media tonelada de oro y plata, más de 476.000 euros en efectivo y además han bloqueado activos financieros por un valor superior a los 458.000 euros.

Las investigaciones comenzaron en diciembre de 2013 en Cantabria sobre una empresa que estaba tratando de vender láminas de oro de 24 quilates presentando una factura para justificar la procedencia del metal, la cual mostraba ciertas irregularidades.

Las pesquisas condujeron a una serie de empresas que habrían diseñado un entramado para la defraudación del IVA y la justificación de la procedencia de los metales obtenidos al margen de la legalidad.

La mayor parte del oro y plata con el que los investigados comerciaban se producía al margen de los requisitos exigidos en la legislación vigente, sin ningún tipo de control policial o administrativo.

Las empresas no registraban los metales en los preceptivos Libros de Policía, de hecho la mayoría carecía de ellos, no cumpliendo por tanto las obligaciones de comunicación y de conservación hasta que se verifique la legitimidad de la procedencia del mismo.

Las irregularidades detectadas no sólo afectaban a estos libros de registro, sino también a la procedencia y trazabilidad de los metales preciosos comercializados, a la veracidad sobre su facturación y al cumplimiento de las obligaciones fiscales, fundamentalmente en declaraciones de IVA.

Pequeños proveedores, intermediaros y grandes distribuidores

Los datos disponibles apuntaban a un entramado creado para dar salida a metal no registrado de dudosa procedencia, de hecho posiblemente proveniente de delitos contra el patrimonio o contrabando.

Las operaciones de compraventa de metal realizadas a través de las sociedades implicadas bien no eran registradas, quedando por tanto, en el ámbito de la economía sumergida y dejando de ingresar los correspondientes impuestos.

Se registraban con facturación falsa para cuadrar la contabilidad y justificar las transferencias de dinero entre empresas; implicando en cualquier caso falsas declaraciones ante la Hacienda Pública y obteniendo beneficios fiscales indebidos.

Las empresas que eludían la responsabilidad tributaria del ingreso del IVA eran instrumentalizadas por terceros mediante testaferros.

Concretamente la operativa detectada era la realización de transferencias bancarias a estas sociedades pantalla, obteniendo de nuevo el dinero a través de disposiciones en efectivo por parte de los testaferros.

El dinero en metálico sería utilizado para la adquisición de los metales de procedencia presuntamente ilícita a los verdaderos proveedores de metal.

Más de 150 agentes para interceptar un amplio botín

La operación ha culminado con la imputación de tres personas y la detención de 30 más. En total, los más de 150 agentes que han participado en este operativo han practicado 14 registros en Madrid, cuatro más en Barcelona y dos en Córdoba; todos ellos en relojerías, joyerías, sedes de empresas, domicilios y un despacho.

En estos registros, los investigadores han encontrado más de 400 kilos de plata y 20 de oro en diferentes formatos (pre-lingotes, granalla, láminas o joyas), varios diamantes y otras piedras preciosas. También 476.826 euros, 11.517 dólares y 5.970 francos suizos en efectivo; además de que se ha ordenado el bloqueo judicial de activos financieros de cuatro empresas por un total de 458.440 euros.

La investigación ha sido desarrollada conjuntamente por agentes de la UDEF Central de la Comisaría General de Policía Judicial, la UDEV de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Cantabria, y de la Agencia Tributaria.

Asimismo, han participado funcionarios del Área de Tramas y de UCAI de la ONIF, de la Dependencia de Inspección de Sevilla y Barcelona, y personal de la UAI de la Delegación de Barcelona, Córdoba, Málaga y Madrid. Se incluye también la colaboración de agentes de las Jefaturas Superiores de Policía de Madrid, Cataluña y Córdoba y del Grupo Operativo de Intervenciones Técnicas de la División Económica y Técnica.

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