Donald Trump, el candidato republicano a la Presidencia estadounidense, ha asegurado que deportará a todos los inmigrantes indocumentados y que anulará las políticas del actual mandatario, Barack Obama, en caso de llegar a la Casa Blanca.

"Vamos a mantener a las familias juntas, pero tienen que irse", ha declarado. Al ser preguntado por aquellas personas que no tienen dónde ir, el candidato ha afirmado que se trabajará con ellos pero "tendrán que irse". "Tenemos un país o no lo tenemos", ha indicado.

Trump, de 69 años, también ha asegurado que acabará con las órdenes ejecutivas dictaminadas por Obama sobre inmigración, incluida la que protege de la deportación a los hijos cuyos padres llegaron a Estados Unidos de manera ilegal.

En la actualidad, se estima que hay unos once millones de inmigrantes ilegales en el país. Trump ha generado numerosas controversias por sus declaraciones sobre los inmigrantes, llegando a calificar a los mexicanos de "criminales y violadores".

Por otro lado, Trump ha asegurado que no tiene límite económico en su campaña presidencial, puesto que está preparado para gastar hasta 1.000 millones de dólares (unos 900.000 millones de euros) si es necesario.

Al ser preguntado por la CNN sobre cuánto dinero podría llegar a invertir para convertirse en presidente, ha afirmado que es una cuestión irrelevante. "Gano 400 millones de dólares al año, ¿cuál es la diferencia?", ha indicado.

En este sentido, Trump ha afirmado que no tiene que preocuparse de complacer a inversores como el resto de candidatos a la Casa Blanca, ya que su campaña es autofinanciada.