Las familias y empresas que se declararon en concurso de acreedores (suspensión de pagos y quiebras) ante la imposibilidad de afrontar sus pagos y deudas sumaron un total de doce en Cantabria en el segundo trimestre del año, lo que supone un retroceso del 36,8% respecto al mismo periodo del año anterior, superior al descenso medio nacional del 27,1%, según la Estadística de Procedimiento Concursal del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicada este miércoles.

De abril a junio, las familias en concurso en Cantabria se incrementaron un 100%, pasando de una en este periodo de 2014 a dos, mientras que las empresas que pusieron en marcha este procedimiento cayeron un 44,4%, hasta las 10.

En tasa intertrimestral (segundo trimestre de este año sobre primer trimestre), el número de deudores concursados se incrementó en Cantabria un 9%, correspondiente a uno más. El número de familias creció un 100% y el de empresas se mantuvo invariable.

De las diez empresas que entraron en concurso en el segundo trimestre de este año, nueve eran sociedades de responsabilidad limitada, y una era una sociedad anónima.

En diez casos los concursos fueron voluntarios mientras que se registraron dos necesarios. Por clase de procedimiento, nueve fueron abreviados y tres ordinarios.

El 40% de las empresas que entraron en concurso en el segundo trimestre en Cantabria tenían como actividad principal la construcción (cuatro), mientras que el 30% se dedicaba al comercio al por mayor.

Asimismo, la estadística refleja que el 30% de las empresas no tenía asalariados, otro 30% tenía entre 10 y 19 empleados y un 20% tenía entre seis y nueve. El 40% de las empresas concursadas tiene una antigüedad de 9 a 12 años, en tanto que el 30% se fundaron hace 20 años o más.

El 20% de las empresas concursadas entre abril y junio se concentraron en el tramo de volumen de negocio entre los dos y los cinco millones de euros.