Una vidente auguró a David Marjaliza en julio de 2014, pocos meses antes de su detención como cabecilla de la trama Púnica, que estaba "a salvo" de la investigación de la Audiencia Nacional, que era "una cosa absurda" y que "se iba a descojonar" cuando supiera de qué se trataba.

La conversación, que fue intervenida por la Guardia Civil durante la investigación, es una de las muchas grabaciones que figuran en el sumario del caso. El contenido de la grabación muestra que los organizadores de la trama de corrupción sabían meses antes de ser detenidos que estaban siendo investigados.

En la conversación, Marjaliza —socio del exconsejero madrileño Francisco Granados— habla con una mujer a la que la Guardia Civil no identifica y que le comenta una conversación que ha tenido con Paloma, una vidente que echa las cartas.

La mujer indica al cabecilla de la Púnica que la vidente vaticina que se va a meter "en un negocio muy grande" y que "lo va a sacar adelante peleando".

Respecto a "lo de la Audiencia Nacional", la vidente sostiene que "es una cosa absurda", que Marjaliza está "a salvo y que no se preocupe por nada", que es como "si le estuvieran haciendo una tortura china".

También pronostica la vidente que un tema de "mucha pasta" se va a desbloquear y que el empresario lo va a recibir "como un regalo", dado que lo daba por perdido y ahora lo va a recibir.