Los juzgados de Fontiñas de Santiago de Compostela han acogido una vista con los padres de Asunta, Alfonso Basterra y Rosario Porto, acusados del asesinato de su hija adoptiva, en la que fiscalía y acusación popular han pedido la prórroga de la prisión provisional en la que se encuentran desde septiembre de 2013, puesto que vence dentro de dos meses. Por su parte, las defensas han vuelto a demandar su libertad, que ha sido denegada reiteradamente.

De tal forma, el próximo 24 y 25 de septiembre son la fechas en las que se cumplen los dos años de prisión provisional para Rosario Porto y Alfonso Basterra, respectivamente, mientras que el 29 de septiembre está fijado como el día en el que comenzará el juicio del caso Asunta, después de que la constitución del jurado popular sufriese un retraso el pasado mes de junio por falta de miembros válidos para conformar el tribunal.

Así las cosas, Alfonso Basterra y Rosario Porto han llegado los juzgados a las 10,06 horas de este martes en sendos coches de la Guardia Civil, mientras que su salida, tras participar en la vista, se ha producido a las 12,19 horas.

En declaraciones a los medios a la salida de los juzgados, el abogado de Rosario Porto, José Luis Gutiérrez Aranguren, ha señalado que la vista ha ido "como era previsible", puesto que la acusación popular y la fiscalía ha pedido la prórroga de la prisión a falta de dos meses para el cumplimiento del plazo máximo de dos años en base a la gravedad de los delitos y el "altísimo" riesgo de fuga, mientras que las defensas de ambos acusados han demandado su puesta en libertad.

La Fiscalía pide 18 años de prisión para cada uno de los padres como coautores de un delito de asesinato, frente a los 20 años de cárcel para cada uno que solicita la acusación popular, ejercida por la Asociación Clara Campoamor.

En concreto, la prisión provisional se puede prorrogar hasta dos años más, es decir, hasta un total de cuatro. Ahora deberá decidir el juez, y según ha explicado Aranguren no hay plazo para la resolución, pero supone que "entre hoy y mañana debería estar".

Durante esta vista, Alfonso Basterra ha querido intervenir para reclamar su inocencia, mientras que Rosario Porto no ha hablado, según su abogado, por encontrarse "mal". "No pudo decir palabra, ni el presidente le dio la ocasión de hacerlo", ha dicho sobre su defendida. A pesar de estar sentados uno al lado del otro en ningún momento se han dirigido la palabra.

El periodista y la abogada se encuentran en la prisión de Teixeiro desde pocos días después de que el cadáver de la niña fuese hallado el 22 de septiembre de 2013 en una pista forestal de Teo (A Coruña), acusados de haber tramado un plan para matar a la menor, que pocos días después de su muerte habría cumplido los 13 años.

"No hay ningún tipo de evaluación sobre lo bien o mal que fue para las tesis de unos u otros porque cada uno hace su informe, el magistrado presidente permanece inalterable como es su papel", ha remarcado. "Todo está en su cabeza (del juez) y esperemos que sea favorable", ha agregado.

Asimismo, Aranguren ha explicado que se podría haber esperado hasta septiembre para celebrarse esta vista. "Supongo que aprovechando que yo había pedido la libertad, quiso resolver todo de una vez y por eso nos convocaron hoy", ha indicado.

Mientras que la fiscalía y acusación popular defienden que no hay nada nuevo para la petición de libertad, las defensas señalan que "hay un dato muy importante" en que cabe la posibilidad, a su parecer, de que la celebración del juicio vuelva aplazarse.

Así, el abogado de Rosario Porto ha apuntado que ya se hablaba de riesgo de fuga "en el mes de julio de 2014", pero "ya se está en julio de 2015", mientras que el juicio "se prevé para septiembre como se previó para el mes de julio, pero puede volver a ocurrir lo mismo", en referencia a una posible dilación temporal para que se siente en el banquillo a los acusados.

Por ello, Aranguren no descarta que se vuelva a aplazar el juicio ante la imposibilidad de encontrar número suficiente para encontrar jurado.

También se ha referido Aranguren al "mal" estado de salud de su defendida, puesto que en una situación "penosa como la que está padeciendo se agrava" por "el paso del tiempo", con "operaciones pendientes que se van retrasando", así como "tratamientos psicológicos".

Al respecto, se ha referido a "los efectos que producen estas suspensiones", mientras "está en un tratamiento muy fuerte en este momento".