El incendio declarado el pasado 4 de julio en el término municipal de Luna (Zaragoza), en la Comarca de Cinco Villas, es el segundo con más hectáreas calcinadas en la Comunidad autónoma desde los años 80, según ha detallado este martes el consejero de Presidencia del Gobierno de Aragón, Vicente Guillén.

En rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno, Guillén ha apuntado que de los grandes incendios forestales registrados en Aragón desde 1980, el de Cinco Villas "es el segundo por número de hectáreas calcinadas".

El más grave se registró en Villarluengo (Teruel), en 1994, y terminó con "18.000 hectáreas quemadas", mientras que las llamas han arrasado 14.146 hectáreas en Luna, ha detallado.

El consejero ha explicado que esta semana se celebrará una reunión "de coordinación" para analizar las ayudas que se concederán para atender a las personas que han sufrido daños en este incendio, un encuentro al que asistirán, junto a Guillén, el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, el delegado del Gobierno, Gustavo Alcalde, y el presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero.

Sobre posibles cambios en el mantenimiento de los montes y ante las quejas de los agentes forestales, Guillén ha comentado que aún "no hemos hablado de eso y es muy pronto para hacer análisis de esa envergadura", para recordar que "estamos con unas temperaturas extremas" y solicitar a los ciudadanos que "extrememos las precauciones" para evitar incendios.

Varios focos

De hecho, los servicios de extinción han actuado este mismo martes en diversos fuegos en diferentes lugares de la Comunidad. El helicóptero y la cuadrilla de Ejea ha tenido que actuar en un foco que se había reproducido en el incendio de Asín, que ha sido estabilizado.

Asimismo, los servicios de extinción han intervenido en un incendio que podría estar originado por tareas agrícolas en Langa del Castillo y que también ha quedado estabilizado. En Codos se ha sofocado otro, con una autobomba.

Por otra parte, el incendio iniciado este lunes en Castellote, en la provincia de Teruel, sigue en fase de ser estabilizado, ya que al haber una gran cantidad de maderas se hace muy difícil su extinción total. En el lugar hay una cuadrilla y una autobomba que está trabajando para mojar todo el entorno y evitar su propagación. Se pretende seguir trabajando esta tarde en el control del fuego tapándolo con tierra.