La autora de La Trilogía del Baztán, Dolores Redondo, ha confesado este lunes en Gijón que espera ver en la cárcel a los responsables de la muerte de la niña en la que se basan sus tres últimas novelas, que "supuestamente la asesinaron", ha indicado sobre el caso de una bebé de 14 meses que se cree que fue ofrecida por sus padres como ofrenda a una secta a la que pertenecían hace 30 años.

Un caso que sigue abierto y bajo sumario y que, como ha relatado Redondo, le impactó tanto la noticia de él por la rareza que lo envuelve que se ha convertido en una trilogía. "Aluciné porque no parecía real, parecía de novela", ha remarcado. Esta historia fue el germen de sus tres novelas: 'El Guardián Invisible', 'El Legado de los Huesos' y 'Ofrenda a la Tormenta'.

Y aunque desde los círculos de la citada secta se han intentado poner en contacto con ella, ella no quiere saber nada, tan solo que se haga Justicia. Ha recalcado, durante una rueda de prensa en el marco de la Semana Negra, que los escritores del género negro "aman" el crimen de ficción, pero creen que el real es algo horroroso.

Asimismo, ha explicado que con su presencia en la Semana Negra pone el "broche" a su gira por España antes de dar el salto internacional, donde ya hay publicada alguna novela de la trilogía en 32 países. Le espera ahora un recorrido promocional por Colombia, Argentina, Australia, Italia y, a su vuelta, quiere centrarse en su nueva novela, ya iniciada y en la que explora otras facetas de la literatura, pero también con un crimen de fondo, esta vez ficticio.

Eso sí, ha matizado que su personaje estrella de la trilogía, Amaia Salazar, volverá. Y aunque ha reconocido que entre la primera y la segunda novela sí que sintió el peso del personaje por el que fue conocida, ha señalado que se va al mundo de ensoñaciones en el que escribe y se le olvida. Y es que la escritora ha relato que cuando escribe se pone "modo abuela"

Según ella, ha conseguido encontrar un personaje con el que sentirse cómoda y que a los lectores les guste. Ha ahondado, además, en que la trilogía es como un "iceberg", basado en un auténtico crimen que se sustenta en la fe, en el satanismo, el deseo de la inmortalidad y cómo eso llevo a cometer un crimen "horrible".

'TRAMPOLÍN'

De autores

Por otro lado, ha resaltado el "tremendo trampolín" que supone para un autor la Semana Negra, a lo que ha agradecido la visión que tuvo en su día de su primera novela el director de contenidos del certamen, Ángel de la Calle, pero también del comisario de la BCNegra, Paco Camarasa, en un tiempo donde se publican novelas negras "como lechugas" y en el que algunos catalogaban su obra como de novela fantástica pese a basarse en un hecho real.

De hecho, es la tercera vez que viene al festival gijonés, del que ha asegurado que es "especial, distinto y diferente" y guiado por el espíritu de De la Calle que le da "fuerza". Redondo ha incidido en que la invitación para promocionar sus novelas en Australia surgió precisamente en la Semana Negra.

A este respecto, ha apuntado que España es el único país donde están las tres novelas de la trilogía publicadas, mientras que en Francia y Noruega ya van por la segunda. La autora ha enfatizado también la "excelente" respuesta de Finlandia, que han reeditado la primera novela incluso lo que, según ella, le da una "especial alegría". "Soy feliz de la vida estando escribiendo, sí que lo echo de menos", ha apuntado, no obstante. "Cuando no escribo no estoy bien, tengo cargo de conciencia", ha añadido.

A esto ha sumado que el próximo año ya saldrá a la venta en EEUU. Ha insistido, en este caso, en que no es lo mismo iniciar una gira internacional en la presentación de tu libro que ir con el apoyo de haber pasado ya por la Semana Negra.

Salto al cine

Pero la trilogía de Redondo no solo se queda en el papel, sino que ya se está preparando la adaptación cinematográfica tras comprar los derechos el productor Peter Nadermann. Este se unió con Atresmedia y se espera que el próximo enero comience el rodaje bajo la dirección de Fernando González Molina. Sobre esta cuestión, ha indicado que el el cine es otro lenguaje, se parece a la novela, "pero es otra manera de contar", ha apostillado.

Dicho esto, ha confiado en el trabajo del director por las novelas adaptadas al cine de otros autores. En todo caso, ha matizado que al cine van públicos distintos, aunque los lectores de la trilogía le penalizarían si no es fiel a las novelas. La autora ha confesado, eso sí, que aunque no cree que no se imagina a ninguno de los actores que le dicen, aunque ha apelado a la capacidad de estos de adaptarse al personaje.

Redondo ha querido también agradecer el apoyo de su familia, de su marido que se ocupa de todo y de su hijo mayor, que con 16 años se siente orgulloso de su madre. Es más, solo por eso ha asegurado que "valdría la pena ser escritor y escribir una novela". De su hija pequeña, de 9 años, ha destacado su capacidad para adaptarse con rapidez, ya que ha vivido más desde la infancia que se haya convertido en una escritora reconocida.