La junta directiva de la asociación de empresas de artes escénicas de Galicia (Escena Galega), electa el 30 de junio, asegura que "tenderá puentes" con la administración gallega y nuevas corporaciones municipales para no solo "protestar", sino también "trabajar", según ha destacado su nueva presidenta, Belén Pichel.

En rueda de prensa, integrantes de la nueva junta como la vicepresidenta, Mercedes Castro, y los vocales Xesús Ron y Artur Trillo han expresado este martes su "ilusión" por establecer relaciones con las fuerzas políticas que se están constituyendo en los diferentes ayuntamientos gallegos.

Pichel ha resaltado el impulso que ha tomado la asociación en los últimos meses, al doblar el número de asociados, de 17 a 34 compañías. Así, la presidenta ha llamado a las demás agrupaciones teatrales que no forman parte de Escena Galega a que "se unan", para que el sector escénico no esté dividido.

Según han explicado, la nueva directiva ha creado comisiones de trabajo que realizarán asambleas mensuales para debatir cuestiones como un nuevo modelo de subvenciones, ya que consideran que el anterior está "obsoleto".

Carta de feijóo

Asimismo, los integrantes de la asociación han criticado que el presidente de la Xunta enviase recientemente una carta pidiendo propuestas para mejorar el sector, "a unos meses de acabar su gestión".

Al respecto, Xesús Ron ha criticado que "en estos últimos cuatro años se ve que los 50 folios de peticiones por parte de la asociación no llegaron a la presidencia".

"Hasta ahora parecía que el teatro servía a la administración, cuando es ahora cuando la administración debería servir al teatro", ha afirmado Xulio Lago, quien ha confiado en que el cambio de dirección "sirva como aliciente para que las salas de música se vuelvan a llenar".

Por otra parte, también han denunciado la situación del Centro Dramático Galego, que, según han dicho, pretende contratar mediante concurso a los actores, algo que "no pasa en ninguna parte del mundo".