Representantes de la Hullera Vasco-Leonesa han negado este miércoles en el Juzgado de Instrucción número 4 de León que hubiera falta de medidas de seguridad en el pozo Emilio del Valle, en el municipio de Pola de Gordón (León), donde en octubre de 2013 se produjo un accidente que causó la muerte de seis mineros .

Así lo ha explicado a su salida de los juzgados Antonio Pineda, abogado de una de las víctimas, que ha asegurado que los dos imputados que han declarado este miércoles, el director general de la Hullera, Mario Calvo, y el director facultativo, José Eliseo Solís, "han contado sus propias verdades, que no son ninguna".

Las pruebas testificales sobre este siniestro, que han comenzado este lunes, se prolongarán durante los próximos días y la declaración del presidente de la Hullera, Antonio del Valle, se ha fijado para el próximo 29 de julio.

Según Pineda, tanto Mario Calvo como José Eliseo Solís, en su declaración ante la juez, han negado que hubiera "error en la ventilación" en el interior de la mina y han insistido en que "un hundimiento de la bóveda es imposible que hubiese desplazado tanto metal".

Para ellos, ha agregado el letrado, "el único informe válido de los tres existentes es el realizado por la Hullera Vasco-Leonesa" que recoge como causa del siniestro "una emisión súbita de metano que tuvo un alcance imprevisible en su magnitud y consecuencias".

No obstante, Pineda ha recordado que existen otros dos informes, uno realizado por el Servicio de Minas y otro por un perito independiente de la Universidad de Oviedo, que según Calvo y Solís "son incorrectos".

De sendos informes se desprende, ha explicado el abogado, que "hay falta de medidas de seguridad" en el pozo Emilio del Valle en el momento en el que se produjo el siniestro que ocasionó la muerte de seis trabajadores.