La localidad gaditana de Chiclana vuelve a situarse una vez más en el punto de mira del urbanismo ilegal. Guardia Civil, Policía Nacional y Fiscalía de Medio Ambiente han logrado destapar una trama dedicada a la falsificación de certificados y documentos para la construcción de viviendas ilegales en suelo no consolidado de la localidad.

La operación, que ha sido bautizada como Obra Nueva, se iniciaba hace aproximadamente un mes con la denuncia de un particular, que había sido víctima de los autores de esta trama. Ya se ha cerrado la segunda fase de este operativo con un balance de cuatro detenidos por presuntos autores delitos de falsificación documental y contra la ordenación del territorio.

Entre los detenidos figuran arquitectos técnicos y agentes inmobiliarios, aunque fuentes cercanas al caso afirman que la operación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones "más comprometidas", como directores de banco.

Modus Operandi

Los autores de la trama se acercaban a los propietarios de parcelas de zonas como El Marquesado, el Pinar de los Franceses o Los Gallos (parajes urbanos no consolidados) y se ofrecían a gestionar la venta del terreno.

Para ello, el propietario les entregaba un poder notarial que les daba vía libre para actuar. Así, dividían la finca en parcelas y emitían un certificado garantizando la existencia de varias viviendas que en realidad no existían, aunque en los documentos figuraba que tenían más de cuatro años de antigüedad.

De este modo conseguirían eludir responsabilidades penales o económicas, puesto que el delito había prescrito.

La investigación se centra ahora en descubrir a todos los implicados en la trama, cuántas transacciones han podido realizar o cómo lograban la concesión de préstamos hipotecarios para edificar los inmuebles que, además, ya estaban supuestamente construidos.