La Comisión Europea considera que la última contraoferta enviada por el primer ministro griego, Alexis Tsipras, en materia de ajustes y reformas que Atenas está dispuesta a emprender para desbloquear el rescate constituye una "buena base para avanzar" en la cumbre de líderes de la eurozona que se celebra este lunes. El presidente de la CE, Jean-Claude Juncker, ha afirmado que no sabe si Grecia y los socios de la eurozona lograrán un acuerdo este lunes, pero ha reconocido que se han hecho progresos en los últimos días.

La contraoferta griega fue recibida este domingo por los máximos dirigentes de la troika: Juncker; el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi; y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde.

El primer ministro heleno se ha reunido este lunes en Bruselas —antes del inicio del Eurogrupo y de la cumbre de líderes de la eurozona— con Juncker, Lagarde, Draghi y el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem. Tsipras también presentó sus propuestas este domingo en una llamada telefónica a la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, François Hollande.

Al inicio de la reunión a cinco bandas, Tsipras ha manifestado su deseo de que Grecia "vuelva al crecimiento dentro de la eurozona. "Queremos volver al crecimiento dentro de la eurozona con justicia social", ha declarado brevemente a la prensa junto a Juncker, quien le ha recibido en la sede del Ejecutivo comunitario.

"Ha llegado el momento de una solución sustancial y viable", ha añadido el primer ministro heleno.

El ministro francés de Finanzas, Michel Sapin, por su parte, considera que las últimas propuestas hechas por las autoridades griegas para llegar a un acuerdo con sus acreedores sobre un nuevo programa de salvamento son "de calidad". Sapin, en una entrevista a la emisora francesa RFI, en la que no dio detalles sobre el contenido de las proposiciones hechas por Atenas, dijo que ve "el trabajo que se hace" y que "es de calidad".

Insistió en que para que haya un compromiso es "necesario que haya evolución de uno y otro lado. Se está trabajando y se hace en buenas condiciones".

Sobre las concesiones que sus socios europeos están dispuestos a hacer al Ejecutivo griego del primer ministro, Alexis Tsipras, elegido con la promesa de poner fin a la austeridad, Sapin reconoció que "no se puede pedir a este Gobierno hacer la misma política que el precedente". Pero a continuación añadió que "Grecia ha firmado acuerdos con las instituciones internacionales" y "hay que respetar los acuerdos firmados".

Por otro lado, el ministro francés de Asuntos Europeos, Harlem Desir, señaló que de cara al futuro, habría que dejar al FMI al margen de la gestión de una crisis similar dentro de la moneda única, que debería ser tratada exclusivamente por los europeos. "La lógica sería no continuar con el FMI", comentó en una entrevista a France 2, en la que argumentó que "sería mejor que los europeos asumieran sus responsabilidades".

Mientras se suceden todas estas reuniones y declaraciones, el BCE ha aprobado de nuevo aumentar la provisión urgente de liquidez para los bancos griegos, tras haberlo hecho el viernes, según informaron a Efe fuentes próximas a la negociación.

El consejo de gobierno del BCE ha decidido ampliar el máximo de liquidez que pueden pedir prestado los bancos griegos con carácter de urgencia, si bien las fuentes no facilitaron cifras concretas ni este lunes ni el viernes. El BCE responde de este modo al incremento de la fuga de capitales de los bancos griegos.