El subdirector general de Actividades Cinegéticas de la Generalitat, Jordi Ruiz, ha defendido los beneficios de la caza para el entorno rural, ya que evita daños en los cultivos por el exceso de fauna salvaje, así como accidentes de tráfico y la proliferación de enfermedades animales.
Lo ha expuesto en una jornada que ha tenido lugar este viernes en el Centro Tecnológico Forestal de Catalunya (CTFC) en Solsona con el objetivo de dar a conocer estos beneficios en los entornos urbanos.
Ruiz ha señalado que el número de cazadores está disminuyendo y son de cada vez más edad —uno de cada tres está jubilado—, y aunque cada año se cazan más animales, el crecimiento de las poblaciones salvajes es superior al de ejemplares abatidos.
Ello se está traduciendo en un aumento de los daños a cultivos, accidentes de tráfico con animales salvajes y enfermedades, como la sarna de la cabra, ya que no hay predadores naturales de grandes mamíferos, principalmente jabalíes, ciervos, corzos y rebecos.
Ruiz también ha recordado que la caza genera actividad económica con su práctica y con la venta de la carne de los animales capturados.
La jornada ha sido organizada por la Sociedad de Cazadores de Solsona, el CTFC, Icta y Cinegeticat, con la colaboración del Ayuntamiento de Solsona, el Consejo Comarcal, la Diputación de Lleida, la Federación de Caza de Catalunya y Forespir.
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