Los sindicatos mayoritarios Comisiones Obreras y UGT rechazan la reapertura de la planta de Coca-Cola Iberian Partners en Fuenlabrada si la compañía no se compromete a mantener las mismas condiciones a sus trabajadores y la misma labor productiva que había antes del cierre en marzo de 2014.

La empresa, en concreto, ha informado este viernes en una nota de prensa la reapertura de la planta de Fuenlabrada, que volverá a abrir sus puertas dentro de cuatro meses pero con cambios. La antigua embotelladora se reabrirá como centro de operaciones industriales y logísticas, dando soporte a la red nacional de la compañía, por lo que abandona su labor productiva como embotelladora, una cuestión que rechazan las organizaciones sindicales.

"La setencia determina que los trabajadores tienen que volver al puesto de trabajo como si no hubiera existido el ERE porque la sentencia fue nula", comentan a 20minutos fuentes de Comisiones Obreras en Madrid, en referencia a la sentencia de la Audiencia Nacional del pasado 14 de junio ratificada hace unas semanas por el Tribunal Supremo.

"Seguiremos manifestándonos como hasta ahora hasta que no se nos garantice una incorporación al mismo puesto de trabajo y con las condiciones que teníamos con anterioridad. Es alucinante que con dos sentencias la empresa siga mareando la perdiz". De esta manera, los empleados mantendrán las manifestaciones de todos los viernes en Callao, así como el campamento instalado frente a la planta y que lleva 15 meses en activo. "Son personas muy fuertes y con las ideas muy claras".

Para los trabajadores, el comunicado no marca ninguna diferencia. "No hay una reincorporación formal" porque la compañía no les ha comunicado directamente la decisión de reabrir, "simplemente lo han hecho a través de una nota de prensa", en la que aseguran que un total de 820 trabajadores de la planta madrileña tendrán la posibilidad de reincorporarse al centro de trabajo en cuatro meses.

Denuncian, sin embargo, que no exista "un proyecto industrial real" y que tampoco hayan abierto "una mesa de negociación". Tal y como ha podido saber este medio, Coca-Cola tiene pendientes de pago los salarios de tramitación de los trabajadores desde el pasado mes de octubre a diciembre.

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Respecto a los empleados afectados por el cierre de otras fábricas, que ya no existen como las Asturias, Palma de Mallorca y Alicante, Coca-Cola ha asegurado que se estudiarán las posibilidades para su reincorporación a los centros de trabajo de su misma ciudad que mantienen su actividad actualmente.

El alcalde del municipio, Manuel Robles, ha comentado que esta reapertura es una "excelente noticia".  "Se trata de una excelente noticia para los trabajadores y para la ciudadanía en general" ha explicado Robles, quién ha hecho un llamamiento a ambas partes para que se lleva a cabo una negociación a través del diálogo.

Robles ha felicitado a los trabajadores "porque el esfuerzo y las reivindicaciones que han protagonizado durante todos estos meses han cristalizado en la reapertura de la planta".