El Ayuntamiento de Zaragoza ha finalizado la restauración de las escaleras del monumento al Batallador en el Parque Grande José Antonio Labordeta y este viernes se han retirado la vallas de protección y se abrirá al público.

Se han reparado y sustituido baldosas rotas o mal colocadas puesto que las balaustradas de piedra, que hacen de barandilla, no presentaban desperfectos de consideración.

Estas obras de reparación han sido asumidas por las empresas que, en su día, acometieron unos trabajos de remodelación en 2010 y cuya ejecución y mantenimiento no se realizó de forma adecuada, ha indicado el Ayuntamiento de Zaragoza en una nota de prensa.