Los tres jóvenes que denunciaron por abusos sexuales al expresidente de Cruz Roja Banyoles (Girona) Joaquim Homs han asegurado este lunes, en el primer día del juicio, que Homs les besó y les tocó los genitales, entre otras conductas sexuales, a cambio de ofrecerles trabajo o regularizar su situación en el país.

Según el fiscal y la acusación particular, Homs aprovechó su cargo en la entidad para abusar de estos jóvenes -dos menores-, todos de origen marroquí y sin recursos, para "exigirles" que se ducharan o durmieran desnudos con él, por lo que piden entre 14 y 18 años de cárcel por tres delitos de abusos sexuales y prostitución de menores.

Durante la sesión de este lunes en el Juzgado Penal de Girona por estos presuntos abusos que sucedieron entre 2006 y 2011, los jóvenes han asegurado que el acusado les demostraba que "tenía mucho poder" para darles trabajo o regularizar sus papeles, por lo que les coaccionaba para no rechazar sus peticiones sexuales.

Una de las supuestas víctimas ha explicado que tenían que "aceptar sí o sí porque toda su vida estaba en las manos" de Homs. En esta línea, los jóvenes han relatado que al principio el expresidente de Cruz Roja les besaba en la mejilla y les abrazaba, pero al cabo de unos meses empezó a obligarles a dormir desnudos con él, a ducharse con él, a enjabonarle y masturbarle".

En esta misma línea han explicado que Homs les decía que "los tocamientos y los besos eran normales, ya que les quería y sólo él podía ayudarlos", ha asegurado uno de los jóvenes, que ha insistido en que Homs hacía con ellos lo que quería, aprovechando que dependían de él para subsistir en el país.

Los tres jóvenes denunciaron al expresidente de la Cruz Roja Banyoles en 2013, y el abogado de la acusación particular insiste en que hay jóvenes que han retirado la denuncia contra Homs por miedo. El acusado tenía que declarar este lunes en el Juzgado Penal número 3 de Girona, pero a petición de su abogado será el último en declarar, en principio, el próximo miércoles.