El Gobierno de Principado de Asturias ha aprobado esta semana, en la reunión del Consejo, firmar convenios de colaboración con los ayuntamientos de Peñamellera Baja, Cangas de Onís y Candamo para la conservación, apertura al público y difusión de la cueva de la Loja, el dolmen de Santa Cruz y la cueva de la Peña, respectivamente.

El acuerdo contempla la concesión de 3.900 euros a cada ayuntamiento para la contratación de un guarda-guía. Por su parte, los ayuntamientos se comprometen a mantener en condiciones dignas y adecuadas los caminos y accesos exteriores de la cueva.

La Ley de Patrimonio Histórico Español otorga a los lugares con arte rupestre, sea cual sea su cronología y soporte, la máxima categoría de protección que es la de Bien de Interés Cultural.

La cueva de La Loja, en el concejo de Peñamellera Baja, alberga un conjunto de representaciones de arte parietal pertenecientes al periodo Magdaleniense que hacen que el yacimiento sea un punto de gran interés cultural y turístico.

El Dolmen de Santa Cruz, en Cangas de Onís, es uno de los monumentos neolíticos asturianos más interesantes sobre el que, ya en el siglo VIII d.C., el rey Favila mandó construir un templo en honor a la Santa Cruz, del que todavía se conserva la lápida de fundación, que dota al monumento un gran valor arqueológico.

La cueva de La Peña, en el concejo de Candamo, alberga un conjunto de representaciones de arte parietal que hacen que el yacimiento sea uno de los más interesantes santuarios paleolíticos.