El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ha destacado este miércoles que mantiene "puntos de vista distintos" con la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, en "algunos cuestiones", pero que su relación con ella es "cordial, afectiva y de buenos compañeros de partido".

Fabra se ha pronunciado así en una entrevista a 'Las mañanas de RNE recogida por Europa Press, preguntado "por si es una leyenda las malas relaciones" que mantiene con Barberá. Al respecto, ha destacado que Barberá es "una gran alcaldesa" y durante sus 24 años de gobierno municipal ha sido "un ejemplo" para "todas personas dedicadas a la política, sobre todo, para los que hemos tenido un pasado municipal".

Fabra ha insistido en que el trato y la relación que mantienen son de "compañeros de partido y responsables de distintas administraciones" y que como buena alcaldesa que es "siempre" pide "lo mejor para su ciudad", aunque ha reconocido que en esta legislatura "no tenían dinero para abordar muchas de las cosas" que solicitaba Barberá al igual que ha ocurrido con las peticiones de otros alcaldes.

Preguntado por si va a querer la presencia del presidente del PP y del Gobierno, Mariano Rajoy, tras su implicación en la campaña andaluza y "los malos" resultados conseguidos, ha replicado: "puede estar aquí las veces que quiera y estaremos encantados de recibir a una persona que ha hecho lo impensable: hace tres años estábamos como Grecia y ahora estamos como Alemania". Con todo, ha insistido en que se debe mejorar la comunicación del partido.

Preocupado por fitur

Por otra parte, ha señalado que "desde luego" que se siente "preocupado" por el juicio que comenzó ayer que juzga la pieza 3 del caso Gürtel, relativa a presuntas irregularidades en contrataciones en la feria Fitur, en la que hay 13 acusados, entre ellos, Such y la también exconsellera, expresidenta de las Corts y alcaldesa de Novelda (Alicante), Milagrosa Martínez, ya que "una de las cosas que más he intentado es demostrar que la Comunitat Valenciana no es lo que se ha querido presentar de estar vinculada a la corrupción y comportamientos nada ejemplares".

Así, ha insistido en que ha hecho "todo lo que tenía que hacer" para que entre los políticos con responsabilidades que vayan a ser juzgados por corrupción "dejaran sus cargos en el grupo o en el gobierno". En ese sentido, preguntado por si se ha sentido sólo al adoptar estas decisiones, ha comentado que "cuando uno está en correspondencia con lo que piensa y sabe que el ciudadano si no ve una línea de ejemplaridad se puede producir una fractura".

"No había otra manera de recuperar la confianza de los ciudadanos sin entrar en valoración de si culpables o no, estas personas no podían representar un partido ni unas instituciones desde primera línea", ha recalcado Fabra, que ha destacado: "hemos colaborado y apartado a estas personas. Más no podíamos hacer y ahora hay que pedir que la Justicia actúe".

Respecto a la situación de Milagrosa Martínez, ha comentado que han realizado "todo lo que teníamos" que hacer ya que primero, ha recordado, se le pidió que dejara la alcaldía y además ha señalado que los concejales que no estaban de acuerdo con la decisión de mantener su apoyo al frente de la alcaldía han abandonado sus competencias mientras que al resto se les ha abierto también un expediente de expulsión.

"Es incompatible estar sentada en el banquillo con la alcaldía porque el tiempo que está en el juicio no está dedicado a los ciudadanos", ha recalcado. "Se le dijo por activa y pasiva y no lo quiso hacer y se ha expulsado", ha apostillado.

Fabra ha comentado que la situación del exvicealcalde Alfonso Grau fue "distinta" ya que la imputación "le pillo estando de vacaciones, porque se acababa de casar, y lo primero que hizo fue anunciar que dejaba su cargo".

Preguntado por su la ciudadanía olvidará los casos de corrupción y ganarán las elecciones, ha comentado: hay que poner en valor lo que hemos hecho, el trabajo realizado en condiciones muy adversas, pero conseguido poner el barco en el rumbo adecuado para crecer".

Fabra ha señalado que sus dos preocupaciones básicas eran la economía y la corrupción. "Hemos actuado como correspondía enderezando la primera y siendo inflexibles con la segunda. Mientras yo sea presidente no cabe estos comportamientos", ha advertido.