El PSOE y el PP ganan un diputado al quedarse sin representación el PA y el GIL. IU se mantiene con dos. La Diputación de Málaga se le resiste a los populares. Ni la victoria de Marbella arrancándole los votos del defenestrado GIL, ni los que logran arrebatarle al PSOE en Vélez-Málaga. Antequera, una de las llaves, sigue siendo un granero socialista. Y a ello se suma la mayoría lograda en Benalmádena al caer el GIB.

Estos resultados son los que han terminado por volver a dejar al PSOE al mando de la Diputación, gracias al apoyo de IU. Aunque los populares han sido la fuerza más votada (con el 38,76% del electorado de la provincia frente al 35,3% de respaldo obtenido en 2003), el PSOE (35,9% de los apoyos) obtiene 15 diputados, uno más que en 2003.

Lo que está por ver es qué barón socialista ocupará la presidencia. Si el PP ganaba, se había designado a Joaquín Ramírez. Los socialistas no han elegido a ningún candidato: puede que el sillón se lo disputen Salvador Pendón; el candidato de Marbella, Paulino Plata, e, incluso, la mismísima secretaria provincial, Marisa Bustinduy.