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El consumo de drogas legales como el alcohol, el tabaco y los hipnosedantes con receta ha aumentado ligeramente en Asturias en los últimos dos años, periodo en el que los consumos de cannabis, cocaína, éxtasis, anfetaminas, alucinógenos y otras sustancias ilegales ha descendido de forma notable. Las prevalencias más altas se observan en la población parada e inactiva.

En rueda de prensa, el director general de Salud Pública, Julio Bruno; el jefe del servicio de Promoción de la Salud del Principado, José Ramón Hevia; y Antón González, responsable del Observatorio de Drogas, han presentado los datos de la Encuesta Domiciliaria sobre Alcohol y otras Drogas (EDADES) que el Plan Nacional sobre Drogas realiza cada dos años en población con edades comprendidas entre los 15 y los 64 años.

Respecto a los resultados de EDADES 2011, en 2013 se observa un ligero aumento en el porcentaje de consumidores de drogas legales y una disminución en las de comercio ilegal. Además, en ambos casos, la proporción de consumidores varones es mayor con la excepción de los hipnosedantes, donde las mujeres multiplican por dos y por tres los porcentajes.

La edad media de inicio al consumo de las diferentes drogas se mantiene estable con respecto a anteriores ediciones de la encuesta, de modo que las drogas de inicio más temprano (en torno a los 16 años) siguen siendo las de comercio legal y mayor prevalencia, que son tabaco y alcohol. Los primeros consumos de otras sustancias como el cannabis o el éxtasis se registran a partir de los 18 años.

Julio Bruno ha señalado que la próxima ley de drogas que se votará este viernes permitirá afrontar "con nuevos instrumentos" este incremento "preocupante" del consumo de estas drogas toleradas. Respecto al consumo de tranquilizantes ha señalado que la media de consumo se encuentra ligeramente por encima de la media nacional, un 14 frente al 12 por ciento.

Tabaco y alcohol.

En lo que respecta al tabaco, se observa que aumentan los fumadores diarios y aquellos que lo hacen de forma experimental. Por edad, aumenta desde los 15 a los 25, se mantiene desde ahí a los 55 para comenzar a descender. La encuesta pone de manifiesto que desde finales de los 90 el porcentaje de personas que han abandonado el tabaquismo ha aumentado 12 puntos porcentuales en los hombres y 10 en las mujeres.

Por su lado en el alcohol el consumo diario se mantiene estable dentro de una tendencia ligeramente a la baja desde los primeros años del siglo XXI. Los consumos de riesgo (aquel que aumenta el riesgo de consecuencias adversas para el bebedor o para los demás) y perjudicial (el que conlleva consecuencias para la salud física, mental y social) son mayoritariamente masculinos. Por grupos de edad, el de riesgo es más alto en los grupos de edad más joven y mayor (de 15 a 24 años y de 55 a 64 años), mientras que el perjudicial se focaliza mayoritariamente en el grupo más joven (entre 15 y 24 años).

En relación al cannabis, se trata de una droga consumida sobre todo en las edades más jóvenes (entre 15 y 34 años), si bien presenta consumos esporádicos y habituales en el resto de grupos de edad, aspecto que no se da en otras drogas. El consumo de cocaína presenta un comportamiento similar al del cannabis, con unos consumos esporádicos y habituales que han decrecido en los últimos quince años, frente al experimental, que aumenta. Destacan los consumos en los grupos más jóvenes, en particular el consumo experimental de los jóvenes entre los 25 y los 34 años.