El niño de tres años hallado muerto en la madrugada del lunes al martes en una balsa de Los Montes, y cuya desaparición se denunció en Rincón de la Victoria (Málaga) horas antes, recibirá sepultura este jueves en la localidad malagueña de Marbella.

El padre del niño y toda la familia paterna han mostrado su "más sincero agradecimiento" a los miembros de la Guardia Civil, Policía Local, Bomberos y Protección Civil del destacamento de Rincón de la Victoria", así como a los vecinos que, "de forma voluntaria, participaron en su búsqueda, al igual que a aquellas instituciones y personas que nos han hecho llegar sus condolencias y muestras de cariño".

Asimismo, han solicitado a través de un comunicado que se respete "nuestro deseo de velar su cuerpo y darle cristiana sepultura en la más estricta intimidad".

Los hechos sucedieron el pasado lunes. El actual novio de la madre del niño denunció la desaparición del pequeño sobre las 17.30 horas, indicando primero que se había perdido en un centro comercial de Rincón de la Victoria. Así, agentes de la Guardia Civil iniciaron la búsqueda en colaboración con la Policía Local, personal del sistema Emergencias 112 Andalucía y un gran número de vecinos de la localidad.

Pocas horas después, los agentes hallaron el cuerpo sin vida del menor, que residía en la barriada de El Palo, en Málaga capital, en una balsa que se encuentra dentro de un recinto vallado, en los Montes de Málaga. Es una alberca de grandes dimensiones, ubicada en una zona de difícil acceso, que se utiliza habitualmente para la lucha contra incendios.

Los agentes detuvieron a la pareja sentimental de la madre, un hombre de 23 años, como presunto autor de los hechos. Éste, según han indicado fuentes cercanas al caso, está a la espera de pasar a disposición judicial, mientras los investigadores ultiman las diligencias para determinar el grado de participación en los hechos.

En un primer momento el detenido, que, al parecer, tiene cierto grado de discapacidad, dijo que el menor había desaparecido en un centro comercial, pero las cámaras de seguridad mostraron que el niño no había estado allí. Después afirmó que lo había perdido de vista en una playa y se buscó al niño en un acantilado conocido como El Cantal, un área de rocas por donde discurre el paseo marítimo del municipio. Finalmente, sobre las 01.00 horas, él mismo condujo a los agentes a la balsa donde fue hallado el cadáver.

El arresto se produjo después de que el hombre, que se encontraba al cuidado del niño, cambiara su versión de lo sucedido en varias ocasiones, lo que llevó a los agentes a abrir una nueva vía de investigación, que continúa abierta para esclarecer los motivos y la persona o personas que participaron en la muerte del menor.