Apor los inventores! ¡Fusilemos a Mijaíl Kaláshnikov! ¡Fundamos a Robert Oppenheimer en un hongo radioactivo por parir la bomba atómica! A por sus defensores, también. ¡Cortemos la cabeza a Guillotin! ¡Que no inventen ellos, por Dios! Esta es la lista de los inventos que nunca debieron ver la luz. Malignos, inspirados por Marilyn Manson o por el espíritu de El Fary (que les susurra: ¡blandengues!). Tenemos para todos ellos, y un mensaje a los inventores del Blandi Blub y la navaja suiza: ¡Destierro a Plutón!

"¡Aunque parezca típico, el despertador!", inicia la apuesta Ángel García. Ante ustedes el horror. El portavoz del lunes. El golem mecánico que amarga las fiestas. La línea divisoria entre la infancia y el infierno. La bestia mecánica que le recordará su condición de pelele. Pero, caballero, mejor sería eliminar ese invento del trabajo, ¿no? La pesadilla de los vertebrados modernos. Se queja el que lo tiene, se queja el que le falta. Matar al mensajero no servirá de mucho.

"No deberían haberse inventado las armas: pistolas, bombas, tanques, en fin, todos los instrumentos que sirven para matar y destruir", nos dice Rosa. "El kalashnikov y similares", alega Contestataria. "Las pistolas, bombas, metralletas", añade Rosaflor1966. ¡Pistolas fuera! Y también los perdigones, que son culpables del genocidio de gorriones. ¡Y las navajas suizas! ¡Y las cerbatanas!, que las cargan los indios...

"La televisión, ¿para qué? Hoy en día crea violencia y no te enseña nada útil. Y la bollería, turrones... en general, todos los dulces, todo lo que nos hace engordar", explica Irenegm. Entonces, el peor crimen sería un anuncio de cruasanes con chocolate.

"Creo que el invento que jamás debió inventarse es la silla eléctrica... Pero qué clase de mente enferma es capaz de aunar comodidad y muerte", se queja Olga Soler. Cierto, una muerte cómoda es algo insólito. Piconinis preferiría eliminar "a los ídolos adolescentes prefabricados y sin talento como Abraham Mateo, Justin o Hanna Montana. Son el peor ejemplo para nuestros jóvenes". ¿Líderes románticos para ejércitos con acné? ¿Hemos descartado la silla eléctrica? Estamos perdidos.

"La religión y el dinero", elige Aar. Exacto, siempre unidos, como un sindicato. Así es la religión del dinero, o el dinero de la religión, una unidad mística. Es casi kung-fu. "Las religiones a lo largo de la historia han sido el peor enemigo del ser humano", reafirma Xeriff. ¡Excomulgado! "Yo lo tengo muy claro: el dinero", contesta Nono Pedraza. "Internet", suelta Oscar Sueiras. O mejor, un invento compuesto: Internet + dinero = Google.

"No deberían haberse inventado los políticos", nos dice elespeculador. Pero entonces muchos de estos inventos no los habríamos catado. "Las bombas nucleares. El fútbol de millonarios. Y cobrar un impuesto por el uso de luz solar como energía", escribe Anticorrupción. Que los futbolistas paguen la luz, y que las bombas se acomoden en los hogares, y que los paneles de luz solar sean lanzados sobre Hiroshima. "El armamento nuclear y el armamento químico", añade Catilis. Oppenheimer, Oppenheimer, por qué no te hiciste leñador...

"Los anticonceptivos", dice Noza. ¡Los anticonceptivos no! Que hasta el Papa confirmó que ser cristiano no implica parir cual conejos. En verdad, deberían desarrollarlos más... Un anticonceptivo contra la estupidez. Contra la verborrea. Sí. Uno contra los tertulianos. "Los preservativos (mentales)", responde DgTi. En efecto, deberían quitarlos de la circulación, junto a los billetes de 500.

VJF se queda con "la monarquía". Pero... caerán los reyes y vendrán los presidentes. "El hombre, los hombres son basura", asevera Antiguo Usuario. Caerán los hombres y vendrán otras especies inteligentes como los calamares. "Las ETT y toda subcontrata. Si trabajas en una empresa, deberías ser de esa empresa. Como nuestros padres", alega Tylenol500. Vendrán los calamares y habrá patrones y curritos, y mucho paro (es la crisis). "La ignorancia y la inutilidad", concluye Quatro. De eso no se librarán los cefalópodos. La ignorancia ha resultado ser la materia oscura del cosmos.