Encerrados por la hepatitis C: "Vamos a luchar hasta el final. Ya no tenemos nada que perder"

  • Decenas de miembros de la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C llevan desde el pasado 18 diciembre encerrados en el Hospital 12 de Octubre de Madrid.
  • Exigen al Gobierno que les dé cuanto antes el tratamiento que necesitan para vivir y aseguran que su protesta no tiene fecha de caducidad.
  • "Estamos luchando para vivir pero esta lucha nos va a costar la vida", afirma Elsa, de 48 años, que padece la enfermedad desde hace 25.
  • Unas 35.000 personas en nuestro país se encuentran en una fase grave avanzada de la enfermedad, por lo que su esperanza de vida es muy corta.
Miembros de la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C llevan desde el pasado 18 de diciembre encerrados en el Hospital 12 de Octubre de Madrid.
Miembros de la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C llevan desde el pasado 18 de diciembre encerrados en el Hospital 12 de Octubre de Madrid.
JORGE PARÍS
Miembros de la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C llevan desde el pasado 18 de diciembre encerrados en el Hospital 12 de Octubre de Madrid.

El vestíbulo del Hospital 12 de Octubre está repleto de pancartas. No se trata de ninguna nueva campaña sanitaria de la Comunidad de Madrid ni del Gobierno central aprovechando que este es año electoral. Son mensajes de un colectivo que reclama que no se les deje morir. Así, tal cual. "¡No son muertes, son asesinatos!", se puede leer en alguna. Todas reclaman, en definitiva, una solución a su calvario. Por eso, decenas de miembros de la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C (PLAFHC)  junto a algunos familiares y amigos llevan desde el pasado 18 diciembre encerrados en este hospital de la capital solicitando que el esperado tratamiento llegue para todos los enfermos.

El final de su protesta aún no tiene fecha de caducidad. Lo que sí tienen claro es que no van a parar hasta conseguir su propósito: "Vamos a luchar hasta el final. Ya no tenemos nada que perder". El que habla es Antonio Fernández, portavoz de la plataforma. Contrajo la enfermedad con 16 años y ahora tiene 59. En su caso fue por una trasfusión de sangre:  "También se contagiaba mucha gente en las vacunaciones colectivas que se hacían en la mili".

En España hay unas 50.000 personas que sufren hepatitis C, aunque se calcula que unas 480.000 están infectadas por el virus. De esas 50.000, 35.000 se encuentran en una fase grave avanzada, por lo que su esperanza de vida es muy corta. Sanidad, de momento, solo ha ofrecido tratamiento a 6.000. "Exigimos al Gobierno una solución inmediata. Ana Mato (exministra de Sanidad) dijo en septiembre que habría tratamiento para todos. El Gobierno nos está mintiendo, toreando y ninguneando", asegura este portavoz de la plataforma, que cifra en 60.000 euros el coste de un tratamiento de última generación que tiene su eficacia demostrada.

El día a día en este improvisado campamento con sillas, mesas, sacos de dormir y hasta un microondas para calentar el rancho está muy calculado. Se organizan en tres turnos (mañana, tarde y noche) para poder atender en condiciones a las personas que se acerquen a solicitar información sobre la enfermedad, hacerse socio de la plataforma o adquirir las camisetas y chapas que venden para sufragar sus pequeños gastos.

Después de que este martes se cumpliesen 40 días de protesta, Antonio confiesa que la situación que están viviendo es muy complicada. "Para nosotros está siendo muy duro estar aquí. Por nuestra enfermedad tenemos unas limitaciones físicas y estar encerrados en un hospital nos impide descansar en condiciones", asegura. "Odiamos los hospitales. No queremos saber nada de ellos. Para nosotros esto es una pesadilla pero no nos queda otra opción: somos enfermos y nos vamos a morir si no hacemos nada", añade. "Quremos que se ponga fin a la especulación de las empresas farmacéuticas y que el derecho a la salud esté por encima de todo. Una cosa es ganar dinero y otra es la usura", concluye.

"Estamos luchando para vivir pero esta lucha nos va a costar la vida, aunque son nuestras familias las que lo están pasando peor", replica Elsa, de 48 años, que padece la enfermedad desde hace 25."Hemos llevado este tema incluso al Parlamento Europeo. Espero que Europa nos escuche porque en la UE hay 9.000.000 de personas en peligro de muerte", desvela. "Ya no tenemos miedo a nada porque no tenemos nada que perder", dice a su lado Mayte, 66 años, que sufre la dolencia desde los 20. "¿Nos pueden dejar morir existiendo un tratamiento?", se pregunta.

"Nos han traído hasta roscones de reyes"

Todos estos obstáculos están siendo más fáciles de superar gracias al apoyo que están recibiendo de los vecinos de la zona. "La solidaridad de los vecinos es inmensa. Nos han traído desde agua o galletas hasta roscones de reyes. La gente sabe que no queremos ser estrellas de nada y nos apoya porque es un asunto de vida o muerte", asegura Antonio, que también agradece la solidaridad de todos los profesionales del centro hospitalario: "Nos han mostrado todo su cariño y apoyo".

"La lucha de estas personas es de admirar. Cuentan con toda nuestra solidaridad", cuenta una trabajadora del 12 de Octubre. "Los veo día y noche y no puedo más que solidarizarme con ellos. Yo en su situación haría exactamente lo mismo", sostiene la empleada de una tienda de prensa, alimentación y otros artículos situada en el interior del hospital.

El virus de la hepatitis C fue descubierto en 1989. Su hallazgo permitió reducir los riesgos de la hepatitis posterior a una transfusión, ya que la mayoría de los casos actuales se originaron en los años 70 y 80 a través de transfusiones sanguíneas, cuando aún no se conocía la existencia del virus."Antes se pensaba que esto era una enfermedad de yonquis. Hay mucha gente que la padece y no dice nada por miedo a perder su trabajo", sostiene Antonio.  En la actualidad ya no se contagia por transfusiones, gracias a los estrictos controles, pero el contagio puede producirse por compartir materiales contaminados (jeringuillas, tatuajes, piercing...).

Mostrar comentarios

Códigos Descuento