El cálido invierno: cinco refugios con chimenea y mucho confort

Cuanto peor tiempo haga, mejor. Así nos dará aún más gusto estar hospedados en un bonito refugio invernal. Son muchos los que se reparten por España: casas rurales con chimeneas de diseño o rústicas, pero donde ahora podemos disfrutar de un jacuzzi o un tratamiento termal. Estas cinco que siguen son buenos ejemplos.

Molino de los Gamusinos (Tolbaños, Ávila)

Es un hotel chiquitín, de sólo tres habitaciones, llamadas Invierno, Verano y Primavera. Todo en este antiguo molino del río Voltoya irradia la calidez de lo hecho a mano y lo hogareño. En el Molino de los Gamusinos se disfruta de un desayuno y cena energéticos. Se está estupendamente frente a la chimenea del salón, viendo pasar el agua del río bajo el suelo acristalado.

Hotel Consolación (Monroyo, Teruel)

En sus modernísimas habitaciones con forma de cubo y frente de cristal hay una chimenea colgante que permite contemplar el bello paisaje del Matarraña o disfrutar desde la bañera excavada en el suelo de pizarra. El garaje es un espacio ecléctico idóneo para tomar una copa; en la biblioteca, podemos leer en el viejo sofá Chester de piel con el fuego de la chimenea a tope.

Antigua Casa de Pedro Chicote (Zafra de Záncara, Cuenca)

Todos los lofts y casas de alquiler de este complejo rural tienen chimenea y de diseño, ya sea con forma de huevo, central acristalada, giratoria o estilo plasma. Este es un buen lugar, en lo alto de una peña y orientado a poniente, para contemplar puestas de sol, las más bellas de La Mancha.

Masía Durbá (Castellnovo, Castellón)

Está en el alto Palancia, entre las sierras de Espadán y Calderona. Y aquí en invierno hace frío. De modo que se agradece que haya siete chimeneas, casi tantas como habitaciones. Esta masía del siglo XVIII está llena de maderas asiáticas, muebles coloniales y antigüedades indias y javanesas. Para cenar, sin embargo, prima lo local.

El Privilegio (Tramacastilla de Tena, Huesca)

Se levanta sobre una abadía del siglo XV, que ha sido decorada con moderno gusto y gran cantidad de chimeneas. Otro sitio donde no se siente el frío pirenaico es en el spa, con sauna, baño turco, piscina de tonificación y natación contracorriente, zona de té y tumbonas calefactadas. Es un lugar privilegiado para venir a esquiar o a dar paseos con raquetas, en moto de nieve o trineo de perros.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!