Dos años después de retirarse del universo Star Wars y vender los derechos de su saga galáctica a Disney, George Lucas ha confesado que ha sido "ignorado" para colaborar en el Episodio VII, El despertar de la Fuerza, continuación de las populares aventuras.

"Les vendí mis ideas para el Episodio VII, pero decidieron que en realidad no querían hacer eso, así que lo hicieron a su manera", ha dicho a CinemaBlend.

Según explica la web especializada Entertainment Weekly, no queda claro si las "ideas" que George Lucas le vendió a Disney consistían en una historia específica o en nociones vagas como " los hijos de Han y Leia tienen espadas láser" o "Estrellas de la Muerte" o "naves Ala-Z".

Antes de vender su imperio galáctico, Lucas se pasó décadas asegurando que trabajaba en la secuela de su trilogía original, e inicialmente interactuó con Michael Arndt, responsable del primer guión del Episodio VII.

Sin embargo, cuando el proyecto cayó en manos de Disney, Michael Arndt fue apartado y desplazado por el propio director, J.J. Abrams (Perdidos) y Lawrence Kasdan, guionista del El imperio contraataca (1980), El retorno del Jedi (1983) y también de En busca del arca perdida (1981).

Lucas decidió dejar Star Wars en manos de otros cuando se dio cuenta de que una nueva trilogía le comprometería mucho, y al menos le llevaría otros 10 años. "El tiempo es más importante para mí que el dinero", aseguró.

En su lugar, ahora se ha volcado en lo que llama "películas experimentales" como la cinta de animación Strange Magic.