En un castillo. La ciudad escocesa de Glasgow dio ayer la bienvenida a Espanyol y Sevilla, los dos equipos que mañana disputarán la final española de la Copa de la UEFA en Hampden Park. El primero en aterrizar en la tierra del whisky fue el Espanyol, que eligió un enclave idílico para alojarse. Se trata de un castillo del siglo xviii de 4.000 m2 a orillas del lago Lomond, a 35 km de Glasgow.
El lugar es donde se hospeda normalmente la selección escocesa de rugby y cuenta con todo tipo de comodidades para relajar los nervios: piscina, jacuzzi, pistas de tenis... Ernesto Valverde, sin embargo, no quiso perder el tiempo y por la tarde preparó un entrenamiento bajo la lluvia.
El Sevilla, tarde
Por su parte, el Sevilla llegó a Glasgow con cuatro horas de retraso sobre el horario previsto. Su vuelo acumuló un retraso de dos horas en el aeropuerto sevillano de San Pablo y tuvo que hacer escala en Francia para repostar.
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