Cerca de 5.000 niños no asistieron este lunes a la escuela por los tiroteos entre policías y bandas del narcotráfico que se suceden sin pausa desde hace cinco días en dos favelas de Río de Janeiro, informaron fuentes oficiales.

Según la Secretaría de Seguridad de Río de Janeiro, la mayor tasa de ausentismo se registró en escuelas cercanas a las barriadas de Vila Cruzeiro y el Morro del Alemán, donde desde el pasado jueves han muerto cuatro personas y 31 han sido heridas, en su mayoría por las llamadas "balas perdidas".

Muchas de las escuelas y guarderías de esas zonas decidieron no abrir sus puertas este lunes, pero en las que lo hicieron hubo un altísimo índice de inasistencias, indicó la Secretaría.

En esas mismas barriadas, con el objeto de preservar la vida de sus empleados, la Compañía de Limpieza Urbana decidió suspender también los trabajos de recolección de basura.

A peor

El pasado jueves, un camión de la empresa fue secuestrado por un grupo de delincuentes, que lo usaron para trasladar armas, según ha confirmado la policía.

Los enfrentamientos en las favelas de Vila Cruzeiro y el Morro del Alemán comenzaron la semana pasada, después de que la policía intervino en la zona debido a violentos choques entre mafias del narcotráfico que, al parecer, se disputaban puntos de ventas de drogas.

La ola de violencia en Río de Janeiro ha recrudecido sin pausa desde diciembre pasado, cuando se cometieron una serie de atentados contra autobuses de transporte público y comisarías.

Según las autoridades, la situación ha empeorado debido a que la policía ha adoptado una actitud más enérgica y desencadenado varias operaciones que han permitido desbaratar algunas de las bandas de narcotraficantes que operan en la ciudad.

El gobierno federal ha autorizado, a pedido de las autoridades del estado de Río de Janeiro, la intervención de las Fuerzas Armadas en las tareas de mantenimiento del orden público, pero hasta ahora no se ha definido ni la cantidad de soldados ni la forma en que serán utilizados.

El gobernador de Río de Janeiro, Sergio Cabral, dijo ayer que aún espera una respuesta del gobierno federal y pidió públicamente que el plan de intervención de las Fuerzas Armadas sea definido "lo más rápido posible".

El Ministerio de Defensa, que tiene la última palabra en ese asunto, informó de que "está analizando el caso" y que responderá en el plazo "más breve posible".