El jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), general Jaime Domínguez Buj, ha afirmado este martes que "cuando la metrópoli se hace débil" es cuando "se produce la caída" como ocurrió en 1898 cuando España perdió sus últimas colonias.

Al ser preguntado por la situación en Cataluña durante un desayuno organizado por el Instituto de Cuestiones Internacionales y Política Exterior, ha asegurado que "procesos" de este tipo se producen "cuando el poder central es débil", como ocurrió entonces, aunque ha dejado claro que no cree que el problema se resuelva con "el empleo de la fuerza".

El general ha subrayado que le "duele España" por la situación que atraviesa en los últimos años, y concretamente ha hecho referencia a la abundante cantidad de casos de corrupción que se están descubriendo y al proceso soberanista iniciado en Cataluña.

Sobre este asunto, Domínguez Buj ha señalado ante un auditorio entre los que se encontraban el exministro de Defensa Julián García Vargas así como militares en la reserva y en activo y periodistas, que España "asiste a un proceso que históricamente se produce siempre que el poder central es débil".

Sin referirse directamente en ningún momento al Gobierno de Mariano Rajoy, el general ha comparado la situación actual con la pérdida de las últimas colonias españolas en el desastre del 98: "Cuando la metrópoli se hace débil, se produce la caída".

Domínguez Buj ha remarcado que las Fuerzas Armadas "no son garantes de nada", sino que son la "herramienta que tiene el Gobierno para hacer cumplir la ley y la Constitución" y que por eso están "a las órdenes" de lo que mande el Ejecutivo. De este modo, ha dicho que los Ejércitos deben "estar preparados para intervenir en la forma en que el Gobierno decida", ya sea tanto "en el interior" como "en el exterior".

Eso sí, el jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra ha dejado claro que no considera que el problema que plantea el desafío soberanista pueda "arreglarse con el empleo de la fuerza" o mediante la actuación de los tribunales, sino a través de los mensajes que desde el Gobierno se envían a los ciudadanos.

A su juicio, para atajar desafíos como el soberanismo catalán el Estado debe "ganarse las mentes y los corazones de todos los españoles" para que éstos sean conscientes de que "es mejor seguir siendo español" que buscar la independencia.

El general Jaime Domínguez Buj, ha advertido que el Ejército de Tierra está "en el límite", por los recortes de personal y presupuestario de los últimos años.

La plantilla de Tierra se ha reducido a la mitad desde el año 2000 hasta hoy y actualmente tiene 82.000 efectivos, según el general, quien ha avanzado que dentro de dos años se quedará en unos 70.000 militares.

"No podemos rascar más con el personal que tenemos", ha afirmado Domínguez Buj, quien además ha lamentado que los presupuestos en los últimos cinco años han descendido y hoy se cuenta con "una tercera parte de los que teníamos en 2008".

Así lo ha puesto de manifiesto el máximo responsable del Ejército de Tierra durante una conferencia sobre "Un Ejército para el siglo XXI", organizada por el Instituto de Cuestiones Internacionales y Política Exterior (Incipe), en la que ha repasado las amenazas para la seguridad nacional.

Ha advertido de que la zona del Sahel es la principal amenaza porque es desde donde sale el tráfico de drogas, armas, personas, y el terrorismo yihadista hacia Europa y España. "No hay que olvidar que el Estado Islámico tiene un mapa en el que España aparece pintada en negro", ha señalado el general.

En este sentido ha dicho que la mayoría de las 14 amenazas fijadas por la Estrategia de Seguridad Nacional se dan en tierra y para su resolución y prevención se necesita un ejército terrestre resolutivo y potente. Ha explicado que actualmente se acomete una reestructuración en el Ejército, que pasa por la reducción de Brigadas.

El PSOE ha instado este martes al ministro de Defensa, Pedro Morenés, a exigir una "rectificación urgente" al Jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra por sus declaraciones. En una rueda de prensa en el Congreso, el portavoz del Grupo Socialista, Antonio Hernando, ha tildado esas palabras de "profundamente inadecuadas" e "impropias de una persona" que tiene las "responsabilidades" que ostenta el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra.

Por eso, ha expresado su deseo de que Domínguez Buj "rectifique y aclare" sus palabras y que, en todo caso, Morenés "le pida una rectificación urgente". Los portavoces de Izquierda Plural, José Luis Centella, y de ICV, Joan Coscubiela, también han reclamado explicaciones al ministro e, incluso, que depure responsabilidades.

Centella ha acusado a Domínguez Buj de echar más "leña al fuego" de Cataluña con unas declaraciones que ha calificado como una "barbaridad". "Ha perdido una oportunidad maravillosa para callarse. Se podía haber callado y una vez que no lo ha hecho", ha remarcado. Por su parte, Coscubiela cree que el comentario de Domínguez Buj sobre la "metrópoli" parece más propio de la Legión que del siglo XXI.

El portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, ha afirmado que las declaraciones de Domínguez Buj son "difíciles de comprender" y espera que se hayan producido en un contexto "histórico". En una rueda de prensa en la Caámara Baja, ha recordado que las Fuerzas Armadas conocen perfectamente "su papel" en un Estado democrático y que están a las órdenes del Gobierno. "Lo saben y lo han venido demostrando todos estos años", ha proclamado.

Precisamente, Domínguez Buj ha aclarado en un comunicado que cuando ha dicho que los procesos secesionistas surgen cuando el poder central es débil se estaba refiriendo a la Guerra de la Independencia de 1808, que ayudó a la independencia de los Estados iberoamericanos. Además, ha agregado que se trata de un fenómeno de otras épocas que afectó a otros imperios como el imperios británico, el turco o el romano.

El JEME ha explicado que la respuesta fue "al hilo" de la pregunta que se le ha hecho sobre el papel de las Fuerzas Armadas de Turquía como garantes del Estado y argumenta que ha planteado "cómo es habitual que en las situaciones de crisis haya más riesgos de que se produzcan efectos centrífugos".